Un recorrido por la historia de la aviación militar española. Esto es lo que propone el Ejército del Aire, a través de su Servicio Histórico y Cultural (Shycea), con la exposición itinerante Volar, historia de una aventura, que se inauguró ayer y se puede visitar hasta el próximo 20 de junio en el Tinglado 1 del Muelle de Levante, en el Puerto de Huelva.

En la inauguración de la muestra, que contó con la presencia de autoridades civiles y militares, Enrique Gaviño, concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad del Ayuntamiento de Huelva, agradeció al Ejército de Aire, "que venga a nuestra ciudad y traiga esta exposición en la que se reflejan más de cien años de historia de la aviación militar española, defendiendo nuestro país, nuestros valores y nuestra democracia". Indicó que con esta muestra se convierte una parte del Puerto en una especie de aeródromo, una iniciativa muy original "que es de agradecer" en esta implicación permanente que queremos mantener de Huelva ciudad-Huelva Puerto.

Pablo Gómez Rojo, general jefe del Servicio Histórico y Cultural del Ejército del Aire, señaló que con esta exposición muestran "un trocito de la historia del Ejército del Aire para que Huelva pueda conocernos un poco más de cerca". Componen la colección maquetas de aviones, la mayoría de ellas Bien de Interés Cultural, procedentes del Museo de Aeronáutica y Astronáutica del Ejército del Aire (Madrid), drones de El Arenosillo, fotografías aéreas de Huelva, libros, una reproducción a pequeña escala del Cuartel General de Ejército del Aire y paracaídas y botiquines del conflicto de Ifni. "Es una exposición muy atractiva".

El fin de semana del 15 al 17 de junio los visitantes van a poder además montarse en la cabina de un RF-4C Phantom II, "y sentir lo que vive un piloto", y se expondrá uno de sus motores así como un avión Saeta.

La exposición realiza un recorrido por la historia de la aviación militar española desde finales del siglo XIX con la creación del Servicio de Aerostación Militar en 1884 hasta la actualidad. El teniente Caballero fue el encargado de guiar a los asistentes por la muestra, comenzando por los globos de aire caliente iniciales, a los que siguieron los dirigibles, de los cuales se pueden apreciar la maqueta de dos de ellos, Torres Quevedo y Astra.

A medida que la aviación militar española fue evolucionando "recibe modelos de la época", como es el caso del Maurice Farman M-7, primer avión que tiene motores. El teniente Caballero comentó que en la Guerra de África (1913-1926) tuvo lugar la primera participación de una unidad aérea completa.

En la muestra hay también un espacio para uno de los hitos de la aviación, el vuelo del Plus Ultra. Hay un diorama que recrea la llegada del avión a Buenos Aires, y una maqueta del hidroavión.

Otro de los hitos fue el del denominado Jesús del Gran Poder, "el vuelo continuo con motor más largo, cuarenta y cuatro horas". Despegó el 24 de marzo de 1929 de Tablada (Sevilla) y aterrizó en Camassary (Bahía), con una ruta "marcada a base de sextante".

El teniente Caballero explicó que en la Guerra Civil se emplearon aviones italianos, rusos y alemanes. En la muestra se puede ver una maqueta del avión Mosca. Con todos los aviones alemanes y rusos que quedaron de la Guerra Civil se creó en octubre de 1936 el Ejército del Aire.

También recoge la exposición los primeros aviones de la industria aeronáutica española, el Super Saeta, "que estuvo mucho tiempo operativo", y hay una reproducción del Hispano Aviación HA-300, que "sólo fue una maqueta, un proyecto de avión supersónico".

En 1953, tras el acuerdo de Defensa con Estados Unidos "se reciben aviones de nueva generación y el Ejército del Aire coge una entidad relevante". Posteriormente, en 1986 entra en servicio el F18 Hornet; en 2003 el Eurofighter Typhoon, y en 2016 el Airbus.

Aparte, el Ejército del Aire realiza misiones civiles, entre ellas apagar fuegos. Una reproducción del "primer modelo de botijo" forma parte de la muestra.

El Arenosillo aporta a la exposición tres drones, "la última tecnología, el avión sin piloto". Estos aparatos se utilizan todos los días para entrenamiento de las Fuerzas Armadas. Se programa una ruta desde tierra.

Además hay una maqueta de un avión para que las personas invidentes puedan, a través del tacto, "hacerse idea de cómo es".

La exposición se podrá visitar todos los días, hasta el 20 de junio, en horario de 11:00 a 14:00 y de 18:00 a 21:00.