La obra del artista Bravo Nogales se expone en La Palma

Las salas de exposiciones del Teatro España de la Palma del Condado, sede de la cultura palmerina, acoge hasta el próximo 4 de mayo una muestra de Carlos Bravo Nogales, autor de la imagen de María Auxiliadora. Con esta muestra la Archicofradía de María Auxiliadora cumple un sueño desde que el pasado año se conociera la autoría de la imagen salesiana palmerina a raíz de las investigaciones de Eugenio Bernal.

Un año después, gracias a las buenas relaciones con la familia del artista sevillano, es posible conocer de cerca las distintas facetas del eminente escultor, tallista y dorador. Además, se pone en valor la prolífica obra de Carlos Bravo Nogales que, aunque bastante extensa, es muy desconocida.

La inauguración de la exposición contó con la presencia del alcalde, Juan Carlos Lagares; la concejal de Cultura, Mónica Dorado; el presidente de la Archicofradía, Eugenio Bernal, y de dos hijas del autor, Esperanza y Charo Bravo.

Las obras inéditas que se muestran son propiedad de la familia y reflejan, por un lado, la vertiente científica de sus creaciones y, por otro, la vertiente sentimental ya que pueden verse sus instrumentos de trabajo: la gubia, piedras de ágata o el martillo con los que realizó hace más de setenta años la imagen de María Auxiliadora y otras muchas obras. Piezas que su familia encontró en su taller a su muerte en 1985.

Carlos Bravo fue un gran dorador que, además de sus trabajos en el taller, impartió clases como catedrático en la Escuela de Artes y Oficios de Sevilla. La etapa que más le marcó fue su temprana estancia en el colegio salesiano de la Trinidad de Sevilla, por lo que a lo largo de su vida profesó gran devoción a María Auxiliadora y San Juan Bosco. Su humildad fue uno de los motivos por los que su nombre no cobró relevancia.

La familia del autor contó con una nutrida representación, desde sus hijas, nietos y hasta sus biznietos. El alcalde, Juan Carlos Lagares, tuvo muestras de agradecimiento hacia ellos por su presencia y colaboración en la organización de esta exposición, por lo que les entregó unos obsequios de recuerdo de La Palma.

Las hijas de Carlos Bravo, Charo y Esperanza, manifestaron su agradecimiento a Eugenio Bernal por sus investigaciones hasta dar con el nombre de su padre como autor de la Virgen, y al pueblo de La Palma por este homenaje.

La puesta de largo de esta exposición ha sido un acontecimiento importante para la Archicofradía y también para el enriquecimiento de la cultura, al difundir la figura de un artista poco reconocido en la historia del arte.