Diciembre es el mes por excelencia para la restauración onubense. La infinidad de almuerzos y cenas navideñas se aglutinan los fines de semana –en la mayoría de los casos– en los diferentes establecimientos de la capital. Durante estas semanas ha sido muy complicado conseguir sitio para disfrutar de un rato entre amigos o compañeros de trabajo en un ambiente marcado por los menús de Navidad. Tanta es la cantidad de personas que se reúnen en los bares y restaurantes de Huelva durante estos días que para los hosteleros supone una facturación de un 15% en la suma de todo el año, según apunta a Huelva Información el secretario general de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería del Círculo Empresarial de Turismo, Rafael Barba.

Estos días “son muy decisivos” para los profesionales de la restauración, aunque la seguridad de lleno está casi concebida. “Hemos subido las ventas un 6-7% con respecto al año pasado”, explica por su parte a este periódico el presidente de la Asociación de Bares, Restaurantes y Cafeterías (Bareca) de la Federación Onubense de Empresarios (FOE), Rafael Acevedo. La realidad es que “reservar ahora es muy complicado” además de que “desde mediados de noviembre está casi todo completo”. También, la antelación del alumbrado de Navidad en la capital onubense se convierte en un aliciente para que el centro se dinamice, el comercio venda y los hosteleros llenen los platos de comida. Por ejemplo, Rafael Acevedo asegura que el pasado Puente de la Inmaculada esto consiguió que los bares y restaurantes estuviesen todos completos.

Las reservas por parte de los onubenses comienzan, en algunos casos, desde el mes de octubre, aunque la antelación sigue siendo unos 7-10 días y siempre queda alguien que lo hace a última hora, que “es cuando te das cuenta que hay problemas”, apunta Rafael Barba. Lo que sí es cierto, señalan desde la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería hay gente que “pasa de las aglomeraciones”, de ahí que los almuerzos y cenas de Navidad “se vayan distribuyendo mucho más en el tiempo”.

Sin duda alguna este fin de semana último es el clave de las comidas de empresa y amigos. Son las fechas más próximas a las festividades y es cuando se concentra el mayor número de personas en los establecimientos hosteleros. Tanto Rafael Barba como Rafael Acevedo coinciden en que el calendario se encuentra en unos días muy decisivos para la restauración, para los que además se muestran satisfechos por cómo está funcionando todo y las previsiones que llegan para las próximas semanas. La importancia de estas fechas para la hostelería se asemeja a la Semana Santa, aunque por entonces todo se concentra en siete días y ahora se alarga en cuatro fines de semanas más los días festivos que se suman al lleno de los establecimientos. Cierto es que el último fin de semana de diciembre tiene “menos intensidad” pero de todos modos “hay mucha actividad”, explica Barba.

Desde la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería apuntan que el número de comensales medio es de 10 a 12, mientras que los menús de Navidad tienen un precio medio de unos 30 euros en el que se suele integrar “una copa después”.

Una de las grandes preguntas a la hora de organizar una salida es: ¿almuerzo o cena?. Ante esta cuestión el presidente de de la Asociación de Bares, Restaurantes y Cafeterías, Rafael Acevedo, apunta que “las cenas se llevan más para pequeños grupos y reuniones de amigos, mientras que el almuerzo para las empresas”. Por otro lado, Rafael Barba que en el cómputo global hay más comidas que cenas que “en proporción puede ser un 60%-40%”. Lo que no cabe duda es que el menú navideño es la elección más que mayoritaria para estas reuniones de diciembre. Los productos gastronómicos onubenses copan muchos de estos menús en los que muchos se comparten platos a la vez que se elige un plato principal por persona. Aunque en este tipo de almuerzos y cenas no se suele ir a la carta, las pequeñas reuniones sí que optan alguna vez por consumir tapas y raciones.

A toda esta dinamización hay que sumar el día de mañana y el 31 de diciembre que, un año más, reunirá a miles de onubenses durante el mediodía en los bares que precederá a la cena de Nochebuena y Nochevieja en los diferentes hogares de la capital. Rafael Barba indica también que “existe una alta demanda para pasar el fin de año en hoteles que tengan cena de gala y cotillón”, pero los pocos que ofrecen este servicio “ya están todos llenos”. También hay que destacar el refuerzo de personal que se lleva a cabo estas semanas, donde los hosteleros aumentan su plantilla alrededor de un 20%. Por último, los días 1 y 6 de enero, pueden ser las jornadas de mayor actividad, sobre todo del último, cuando el lleno de la restauración es un seguro en un ámbito familiar tras el paso de los Reyes Magos.