¿Y ahora qué? Pues más marketing raro, responsable y con alma

Cuando una hormiga te entra en la oreja y decide salir sola en cuanto le acercas un bastoncillo, entiendes que hay cosas que no se pueden planificar. Como el futuro. O que se te rompan los dos zapatos a la vez. O que una gaviota coma coliflor. O que alguien pretenda que le lleves redes, contenido y campañas con un presupuesto mensual de 50 €. De todo hay en el mundo.

Este año, en MKS Huelva, decidimos preguntar a nuestras socias y socios por la cosa más rara que habían visto. ¿El resultado? Un catálogo de lo inesperado: tatuajes a lenguados, montañas arcoíris en los Andes, apatía social en tiempos convulsos, recuerdos de Punta Umbría con más colores que un panel de Pantone, trenes que no van a ningún destino (y gente que vuelve andando por las vías), personas a las que no les gusta el jamón de Huelva y otras que dicen simplemente: “ni idea”. Lo raro, ya ves, está en el ojo que lo mira. ¿Seremos gente rara?

Y sin embargo, aquí estamos: caminando —con o sin zapatos— hacia un futuro que no es raro, sino necesario. Porque MKS Huelva ya no es una promesa: es una comunidad activa, profesional y con propósito, que tiene mucha energía y ganas de seguir creciendo.

Lo que hemos hecho (que no es poco)

Después de un 2024 hiperactivo con más de 20 actividades organizadas, en lo que va de 2025:

· Hemos organizado 10 talleres formativos en la Universidad de Huelva.

· Celebrado dos encuentros del programa “Yo sé, tú sabes” para compartir habilidades entre personas asociadas y la sociedad.

· Acogido la Asamblea Anual de la Federación Andaluza de Marketing, que reunió a los clubes de toda Andalucía y a instituciones clave de la provincia.

· Co-organizado un evento de economía sostenible junto a la ONG Mercadillo Solidario.

· Escrito 28 artículos para esta tribuna, ¡contando éste!

· Y disfrutado de espacios para el alma como la Fresquedada de junio en la azotea más bonita de Huelva, la de una de nuestras entidades amigas con acuerdo de colaboración: GrowersGo. Porque no nos olvidamos de que hacer comunidad también es compartir gazpacho sano, ideas y risas.

Lo que viene (y viene con causa)

Mientras muchas personas desconectan en verano, en MKS estamos cocinando el último tramo del año. En otoño queremos lanzar, y para ello buscamos ya la necesaria financiación: un evento sobre inteligencia artificial aplicada con propósito, y otro sobre marketing con causa y triple impacto: económico, social y ambiental.

Además, abriremos nuevos espacios de encuentro con empresas e instituciones que comparten la visión de un marketing más humano, profesional y transformador. Y seguiremos organizando talleres formativos y muy prácticos, abiertos a todas las personas que quieran unirse, con las habilidades destacadas de quienes forman nuestra asociación que las ofrecen así, desinteresadamente. ¡Si es que la generosidad es nuestra marca diferencial!

Nuestro propósito sigue intacto

Es el objetivo fundacional del club, y por eso no perdemos de vista que nuestro propósito es impulsar la profesionalización con marca Huelva de las áreas más estratégicas de cualquier organización: marketing, comunicación, sostenibilidad y gestión de personas. Y también inocularle el gen de la sostenibilidad a nuestro tejido económico y empresarial. Porque el futuro no se improvisa: se construye desde ahora.

¿Y tú? ¿Nos conoces ya? MKS-Huelva es una asociación sin ánimo de lucro. Un espacio de encuentro para profesionales del marketing, la comunicación, la responsabilidad social y la gestión de personas en Huelva. Un lugar para opinar, aprender, compartir y crecer, bajo el paraguas de la Federación Andaluza de Marketing. Puedes saber más de nuestro proyecto compartido aquí: www.clubmarketinghuelva.org

Y si todo esto te resuena… hazte socio o socia. Porque transformar los negocios desde la profesionalización y la sostenibilidad no es una rareza. Es simplemente el futuro. Y en MKS Huelva… ya lo estamos haciendo.

No sabemos si somos lo más raro que has visto —puede que no superemos la apatía general con la que está cayendo o los tatuajes piscícolas—, pero sí sabemos que somos un espacio real, vivo y necesario. Un sitio donde opinar, aprender, compartir y crecer. Donde lo profesional no se pelea con lo humano. Y donde la transformación no es un lema, sino una práctica cotidiana.