Zimmer reivindica la meritocracia como pilar de la Universidad moderna

El ciclo de conferencias La educación de excelencia, auspiciado por la Escuela Andaluza de Economía y que tiene como propósito reflexionar y analizar los cambios necesarios en las instituciones académicas andaluzas mediante las experiencias directas de las cabezas visibles de las 15 universidades más importantes del mundo, contó ayer en la Facultad de Empresariales del Campus de La Merced con la presencia del presidente de la Universidad de Chicago, Robert Zimmer, que ofreció a los asistentes la ponencia Retos y Contextos de una moderna Universidad de Investigación.

Zimmer analizó durante la disertación el contexto histórico de la Universidad y su evolución y desarrollo en distintos puntos del planeta, deteniéndose en el modelo que persigue la excelencia en Estados Unidos. Según su criterio y experiencia, el éxito actual del modelo norteamericano se basa en la "competitividad, la meritocracia y el estudio abierto, riguroso y libre, elementos que han procurado la innovación y la excelencia", un ejemplo que no es "fácil crear y mantener". La creación de redes de especialización y preparar a pensadores "críticos y multidisciplinares" son la base fundamental para formar a líderes capaces de adaptarse a un entorno en constante cambio.

Para construir este modelo es de vital importancia, a juicio de Zimmer, tener una estructura universitaria sólida que cree un clima que favorezca los tres aspectos que para él son básicos: "la variedad, la autonomía y la competitividad".

La variedad en la oferta universitaria estadounidenses, con instituciones de distinto tamaño, especialización y financiación, propicia a la vez la competitividad entre ellas. "Las grandes universidades de investigación luchamos por tener a los mejores profesores y estudiantes", reconoció, una circunstancia que "nos hace crecer y querer ser mejores". Al mismo tiempo "somos universidades autónomas y, por ejemplo, cada una puede elegir" la duración de sus carreras.

La libertad de ideas y el discurso abierto son, a su entender, igualmente indispensables entre el profesorado para que "la educación pueda llevar a la innovación, el progreso y el descubrimiento".