Vivir desde la óptica solidaria

El pintor y escultor Pepe Gámez es de aquellas personas que se resiste a permitir injusticias y desigualdades y, por ello, no se limita a pintar y esculpir sino que, además, dedica gran parte de su tiempo a aportar su granito de arena en otras muchas 'batallas'.

De ahí que este ceutí, que se considera ayamontino de adopción y sentimiento, se haya volcado desde hace años con la Asociación de Padres y Protectores de Niños y Adultos Discapacitados Intelectuales de Ayamonte (Aprosca).

Precisamente, años atrás donó un total de 40 óleos para una exposición benéfica con destino a esta asociación y a Aspandaya, que atiende a disminuidos físicos y psíquicos. Pero no ha sido el único gesto solidario del artista para con estos colectivos, a los que ayuda siempre que puede.

Desde que llegó a la localidad fronteriza, Gámez no pudo resistir la tentación de llevar al óleo rincones de la zona, cuya luz y colorido le embrujó.Con un estilo que irradia serenidad y seguridad, el artista ha sabido plasmar sensaciones y sentimientos que son fácilmente localizables en calles y paisajes tanto de la parte urbana como rural y litoral de Ayamonte.

Así, desde el anochecer del Guadiana, con las luces provenientes de Vila Real de Santo Antonio y Castro Marim, en el Algarve portugués, inundando de colores el río, hasta la empinada barriada de La Villa, muchos han sido los rincones captados por el pincel de Gámez. Pero, además, Gámez ha sido noticia en varias ocasiones, una de ellas por haber sido el autor del ajedrez gigante con el que se recreó la Melilla del siglo XV.

Se trató de una idea del guía de Turismo, Juan José Florensa, que decidió utilizar sus conocimientos en la materia y acometer un proyecto cultural basado en un ajedrez histórico del siglo XV: rey, reina, torre, alfil, caballo y peón.

Las piezas tuvieron como referencias heráldicas e históricas el contexto de la Melilla de la citada época, y sobre ella incluso se interesó la UNESCO. El artista también es una persona muy volcada en el deporte, especialmente el tenis, lo que le llevó a abrir una escuela en las inmediaciones del casco urbano de Ayamonte. Sin embargo, un proyecto situado en los aledaños le ha dado uno de sus mayores disgustos últimamente.

Y es que allí se construye una estación de gas natural, lo que considera un "riesgo" tanto para los alumnos de dicha escuela como para cualquier persona que pase por allí. Gámez, calificó meses atrás de 'bomba' dicha estación.