Villancicos con mucha historia

La conmovedora interpretación ofrecida por el Coro Santo Cristo del Mar, formación radicada en la localidad de Punta Umbría, terminó por inclinar la balanza en una disputada segunda jornada del Concurso Provincial de Villancicos 'Ciudad de Huelva' organizada por Aqualon, el Ayuntamiento de Huelva y el diario Huelva Información. Las cuatro agrupaciones concursantes en la modalidad B del certamen, la correspondiente a los coros formados por adultos, no se lo pusieron nada fácil al jurado, integrado por Eva María González, Rosabel Núñez y Silvia Eugenio, que finalmente decidieron otorgar el primer premio, dotado con 600 euros, a uno de los dos coros puntaumbrieños inscritos este año en el certamen de campanilleros.

Una jornada que comenzó puntual a las 19:00 en una de las salas de cine de Aqualon con la actuación del siempre entrañable y vitalista Coro de Pensionistas del Lazareto de Huelva, dirigido por María José Mato. Los 30 componentes del coro creado por la recordada Amparo Correa interpretaron los villancicos populares Los peces en el río, Noche de fulgor y Campanilleros, este último muy aplaudido por el público asistente.

Tras ellos llegó el turno de la otra agrupación llegada de Punta Umbría, el Coro de la Hermandad de la Santa Cruz, bajo la dirección de Rosa María Reyes, que no sólo se llevaron el premio al mejor inédito con Villancico Marinero, una pieza con un ritmo muy original, sino que además se alzaron con el tercer premio del certamen, dotado con 200 euros.

El Colegio María Inmaculada regresó por segundo día consecutivo al concurso tras alzarse con el primer premio de coros infantiles el pasado jueves. Pero en esta ocasión lo hizo con la formación de adultos Coro Santa Ángela de la Cruz, resultado de la unión de los alumnos que, al crecer, no podían seguir perteneciendo a la agrupación infantil. Muy marcado por la juventud de sus voces, el Santa Ángela de la Cruz presentó dos temas inéditos, Madre de la Navidad y Vive la Navidad, una canción que invita a disfrutar de las pequeñas cosas que ofrecen las próximas fiestas, así como Dios se ha hecho Navidad,todos compuestos por Manuel Jesús Martín, director del coro, junto a Eva Martín. Con letras profundas de mensaje religioso y una instrumentación muy completa, sus 32 componentes dedicaron su actuación a Mariló Lunar, fiel seguidora del grupo presente en la sala y lograron el segundo premio del certamen, que les fue entregado por el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Huelva Manuel Remesal.

Pero fue el Coro Santo Cristo del Mar de Punta Umbría el que, a pesar de la dura competencia ofrecida por el resto de los participantes, consiguió alzarse con el primer premio. La formación nació en el año 89 fruto de la unión de un grupo de personas con grandes inquietudes musicales. Desde entonces se han mantenido activos y cuentan, además de con numerosos premios incluso en certámenes de ámbito regional, con tres discos en el mercado.

Miguel Ángel Rodríguez es el director de este coro que arrancó la ovación del público con el villancico No llores mi niña, una pieza inédita con una letra profunda y comprometida en la que destacó el solo de una de sus jóvenes componentes, que con una voz imponente contó en forma de canción "la historia de muchos niños que por desgracia pasan las fiestas desolados por la separación de sus padres, muchas veces con sus abuelos", como explicó el director.

El coro, acompañado por instrumentos tradicionales navideños además de por bajo y clarinete, se decantó por dos villancicos populares para completar su actuación, Nana de Santa Ana y Las campanas de la mezquita, con el que, como narró el presentador del acto, el periodista Manu Suero, puso "un final espectacular a la noche".

Tras recoger el premio de manos de Joaquín Collado, director del centro comercial Aqualon, Miguel Ángel Rodríguez tuvo palabras de felicitación para el resto de los participantes, "amigos muy cercanos todos ellos y compañeros desde hace muchos años", y deseó "que habite en nuestros hogares la paz y la felicidad en la próxima Navidad".

Un mensaje compartido por los participantes y organizadores de un concurso que después de 30 años de vida es parte indisoluble de la Navidad onubense.