El reloj marcaba las 9:00 de este lunes y la tristeza y la rabia invadía a uno de los vecinos de la barriada Reina Victoria de Huelva capital. La fachada de su casa amanecía con pinturas de diferentes colores como consecuencia de un acto vandálico "sin precedentes" en la zona. El enojo de este vecino se propagaba por todo el vecindario a medida que la noticia corría porque el ataque no afecta únicamente al vecino en cuestión, "sino a todo el barrio porque este monumento histórico tiene sentido en su conjunto, no vivienda por vivienda", sostienen a este diario varios vecinos. Es por ello que piden conciencia ciudadana con un bien tan preciado como es esta barriada onubense.

El vecino víctima del acto vandálico, que prefiere permanecer en el anonimato, había pintado recientemente la fachada de su casa, por lo que ha recibido con suma tristeza este atentado contra una vivienda que no deja de ser un monumento histórico por el nombramiento del Barrio Reina Victoria como Bien de Interés Cultural (BIC), hecho que tuvo lugar en junio de 2002. 

Pintura negra sobre la fachada de la vivienda atacada.

"No es un atentado contra un vivienda, sino contra el Patrimonio andaluz. Si las pintadas fuesen en la Catedral de La Merced, también BIC, ¿sería un atentado contra el ciudadano o contra la Iglesia?", se pregunta uno de los vecinos críticos con esta situación. En este sentido, la diferencia reside en que, al ser viviendas, son sus propietarios los que se hacen cargo de las consecuencias de estos ataques.

El vecino afectado no estará solo cuando esta fachada se sanee, pues en el caso de que el seguro de la vivienda no se haga cargo de este acto vandálico, un grupo de vecinos de la barriada ha formado una cuadrilla para ayudarle a que su fachada vuelva a estar impoluta para embellecer nuevamente la barriada. "Queremos tener la imagen más bonita, dentro de lo posible, para la Semana Santa porque, precisamente, la Virgen de la Victoria realiza una parada justo enfrente de esta casa", cuenta uno de los vecinos consultados. "Aquí hay mucha gente con herramientas y que sabe hacer uso de ellas para arreglar problemas como este, por lo que vamos a tenderle nuestra mano". 

No es el único ataque perpetrado sobre este barrio en los últimos días, "pues hace escasos días un vehículo fue apedreado, ocasionándole abolladuras estas piedras", cuenta otra vecina, que tampoco olvida "los episodios de tiradas de huevos sobre nuestras casas en el último Halloween". 

El muro de la vivienda también quedó afectado.

Desde la asociación de vecinos del Barrio Obrero, que agrupa al 94% de las viviendas, se denuncian otros problemas que padece la barriada, como "los contenedores rotos" o "los problemas de aparcamiento", los cuáles redundan en "coches apilados en las aceras, una imagen que no representa a un bien patrimonial", lamentan. Esta última problemática se traduce igualmente en "ventanas o retrovisores rotos". 

Para ello los vecinos ven como solución el cierre de la barriada a residentes al objeto de que no se produzcan estos apilamientos de vehículos que ya supusieron un grave problema el pasado 7 de noviembre cuando una vivienda se incendió. Aquel día los bomberos tuvieron que llevarse por delante dos vehículos que, mal aparcado, obstaculizaban la llegada del camión de los efectivos, provocando la indignación de los vecinos.