El cómo y cuándo se iba a salir de los meses duros de la pandemia era una incertidumbre total en cualquier sector económico. El coronavirus sigue ahí, y seguirá estando, pero gracias a las vacunas, las consecuencias han dado el vuelco a unos datos catastróficos. Los peores de la historia. Ahora el camino pasa por la recuperación. Volver a estar como se estaba en 2019, aunque no será fácil porque hay muchos factores en movimiento. El primero de ellos son las consecuencias personales que ha dejado la Covid-19 a muchas personas en particular, y muchas familias en general. Y ahora hay que sumar la inflación. El coste de la vida crece con el paso de los meses con números históricos. El combustible, la luz y las materias primas son ejes vertebradores del día a día de la sociedad. 

En el marco turístico, el año 2022 arrancaba con la esperanza de volver a tomar la senda que hubo en 2019. No llegar a esos números, que fueron los mejores de la historia, sino sumar y volver a retomar una actividad lo más normalizada posible. Las previsiones de una recuperación completa marcaban varios años a consecuencia de la Covid-19, y ahora hay que sumar la subida de costes de producción como un obstáculo más para ser la misma imagen que en la prepandemia.

La incertidumbre siempre ha estado ahí. Sobre todo por el comportamiento del cliente a la hora de viajar. Son muchas cuestiones que poco a poco se van respondiendo gracias a los datos turísticos de los establecimientos hoteleros que muestra el Instituto Nacional de Estadística. Con los números de junio publicados, ya se puede hacer un esbozo de lo que está siendo viajar, una vez que el coronavirus está en un segundo plano, y con los obstáculos de la subida de costes. 

Así, el primer semestre, con respecto a los datos de la provincia de Huelva, deja una cuestión muy clara: se hacen viajes de menos días. Factores, habrá muchos, pero el nivel económico de los que hacen la maleta para desconectar ha cambiado de alguna manera. La estancia media en el territorio onubense durante los primeros seis meses de 2019 fue de 3,46 días. Nada que ver con lo que ha ocurrido este primer semestre, ya que la cifra ha bajado 0,75 puntos quedándose en 2,71 días. Mes a mes, no hay ninguno que sea mejor el de 2022 que el de 2019. 

Esto es una consecuencia directa en el registro de pernoctaciones. Según los datos, de 2019 a 2022 se han perdido un total de 364.928 noches en los hoteles de la provincia de Huelva. Es decir, el descenso es de un 20,9%. Al igual que ocurre con los datos de la estancia media, no hay ningún mes del primer semestre de este curso que supere en pernoctaciones a un mes de 2019. 

Uno de los datos esperanzadores es el de viajeros. La verdad que el año comenzó mal, en comparación con el ejercicio de la prepandemia. Hay que tener en cuenta que el 2019 fue el año que más turistas se hospedaron en la provincia de Huelva en la historia. Pero aun así, a partir de mayo la balanza cambió y se superó el número de visitantes, en unos 9.000. Había que esperar para comprobar si fue un hecho aislado pero no. Junio refrendó ese dato con un nuevo crecimiento con respecto a la prepandemia, en esta ocasión de manera más leve, apenas unos 2.000 turistas más. Eso sí, remarcando que 2019 fue el mejor año de la historia. 

Habrá que esperar a los resultados definitivos de la temporada estival, a partir de los cuales se podrá hacer un análisis comparativo más concreto ya que es en estos meses cuando se concentra el grueso del negocio turístico onubense. De momento, según los informes que maneja el Círculo Empresarial de Turismo la ocupación está mejorando las previsiones iniciales.