La Entidad Local Autónoma (ELA) de Tharsis (2.000 habitantes), enclavada en plena Faja Pirítica Ibérica onubense y cuya actividad minera, como en el resto de yacimientos de su entorno, se extinguió en el año 2001 con el cierre de Filón Sur, pretende renacer ahora a través de sus propias cenizas.

Y es que en un mundo en constantes y cada vez más vertiginosos cambios, lo que antes no servía ahora parece que sí y, aprovechando la tendencia alcista del mercado mundial de los minerales polimetálicos, el Consistorio tharsileño ha cerrado un importante acuerdo comercial: la venta de las cenizas de pirita que la actividad extractiva minera de la que ha vivido tradicionalmente el municipio dejó abandonadas a su suerte en dos grandes vacies y a apenas tres kilómetros del casco urbano, con la controversia medioambiental que ello ha supuesto desde entonces por el carácter tóxico de dicho desecho minero.

Por tanto, lo que hasta hace poco era un grave problema para la zona, ha dado un giro de 180 grados y, de la noche a la mañana, ha pasado a ser una buena oportunidad para el desarrollo de la entidad local. Según indicó a Huelva Información el alcalde de Tharsis, el socialista Lorenzo Gómez, este acuerdo comercial no sólo va a suponer un buen "pellizco" económico para las "castigadas" arcas municipales de esta ELA dependiente de Alosno, sino sobre todo por el potencial que supone el proyecto en cuanto a generación de empleo (en Tharsis hay unos 300 parados), riqueza y actividad económica en esta deprimida zona de la provincia de Huelva, una de las más azotadas por la crisis y el paro de toda Andalucía.

Según detalló Gómez a este diario, se trata concretamente de la venta de 3,7 millones de toneladas de cenizas de pirita a la compañía Maprise SA, vinculada a empresarios españoles y alemanes que operan en la actualidad como estibadores en el Puerto de Huelva y que ya es adjudicataria oficialmente de dicha actividad. El objetivo de Maprise, cuya actividad principal según la CNAE (Clasificación Nacional de Actividades Económicas) se centra en el comercio al por mayor de minerales, es destinar finalmente dicho material de desecho a la industria china, que extraerá del mismo diversos minerales polimetálicos (hierro, cobre y otros metales).

La ahora preciada ceniza pirítica se encuentra depositada en dos vacies, visibles desde varios kilómetros de distancia y cubiertos con una capa de tierra de 20 centímetros para evitar lixiviados y que quede al aire, pese a lo cual dicha capa protectora ya se ha resquebrajado en distintos puntos como consecuencia de la acción de los elementos, sobre todo del agua de escorrentía de la lluvia. Uno de ellos, el más grande, ocupa un área de 22 hectáreas mientras que la extensión del segundo es de 8 hectáreas, y ambos están situados a unos tres kilómetros del casco urbano de Tharsis, en la zona de los antiguos talleres y chimeneas de las fundiciones de la mina.

Según Lorenzo, la empresa adjudicataria de la actividad extractiva de las cenizas "ha realizado un trabajo impresionante y muy serio" durante la fase de elaboración y gestión del proyecto, que ha incluido prospecciones, catas y sondeos, "para lo cual siempre ha contado con trabajadores de Tharsis". "Ha sido un trabajo de más de dos años -añade- del Ayuntamiento y la Junta de Andalucía, con el principal objetivo de regenerar una zona degradada por la actividad minera, y de sacarle al mismo tiempo rendimiento a ese material de desecho aprovechando la actual coyuntura del mercado internacional de los metales".

En estos casi dos años y medio se han conseguido, según detalla el primer edil tharsileño, "todos los permisos y requisitos medioambientales y técnicos necesarios para el desarrollo de la actividad". Es el caso de la Autorización Ambiental Unificada (AAU), la aprobación del proyecto, la catalogación del recurso a explotar en la Sección B (yacimiento de origen no natural, de los depósitos que contienen la totalidad de las reservas de gos-sans in vacie y morrongo situadas en Tharsis), el Plan de Labores, el Plan de Restauración posterior a la actividad, y un acuerdo entre la empresa adjudicataria y la Agencia de Obra Pública de la Consejería de Fomento y Vivienda (de la que depende la carretera A-495), para acometer los accesos desde dicha vía (a la altura del antiguo cementerio inglés de Tharsis) hasta los dos vacies que albergan la ceniza de pirita.

En cuanto al inicio de los trabajos, Gómez manifestó que "cuando todo estaba a punto para iniciarse la actividad tras el pasado verano, se ha producido un parón temporal de carácter coyuntural e interno en el mercado chino de las importaciones que ha frenado la puesta en marcha", el cual "se prevé superar en breve ya que la empresa sigue trabajando con vistas a arrancar cuanto antes". En este sentido, aseguró que Maprise "va a iniciar de forma inminente" el Plan de Labores, que incluye los trabajos preparatorios de la infraestructura necesaria para el transporte de las cenizas: acceso a la carretera, adecuación de caminos, vallado perimetral de la zona, instalación de básculas para el pesaje de camiones, lavaderos, oficina en Tharsis y recrecimiento de las balsas existentes junto a los vacies.

Con respecto a la empresa adjudicataria, reseñar que Maprise SA ya obtuvo en noviembre de 2003 una concesión administrativa de la Autoridad Portuaria de Huelva destinada a la explotación de las cenizas de pirita almacenadas en las Marismas del Pinar, en la Zona de Servicio del Puerto de Huelva.

Sin duda, para el regidor tharsileño lo más importante del proyecto "son las impresionantes perspectivas que se van a abrir en la zona una vez se ponga en marcha". Y es que "esto va a suponer un revulsivo en cuanto a la creación de empleo. Los datos que barajan Consistorio y empresa, inicialmente van a ser necesarios unos 30 trabajadores entre camioneros, maquinistas, personal de oficina, laboratorios y peones.

Serán necesarios unos 148.000 portes de camión para trasladar los 3,7 millones de toneladas de ceniza de pirita desde Tharsis hasta el Puerto de Huelva, donde será embarcada rumbo a China.

Otro dato importante apunta a que los trabajos de extracción y transporte de la ceniza se prolongarán por espacio de entre 3 ó 4 años, creando de forma regular entre 30 y 40 empleos durante todo ese tiempo, los cuales en momentos puntuales podrían llegar a ser incluso más, concluye.