Representantes del Sindicato de Enfermería, Satse, en Huelva, encabezados por su secretario provincial, Antonio Botello Lozano, han mantenido una reunión el director general de Personal del Servicio Andaluz de Salud (SAS), el onubense Alberto Fernández Rodríguez, para analizar la situación de la sanidad pública en Huelva y las principales reivindicaciones de las enfermeras y fisioterapeutas.

Satse ha solicitado la intervención del director general de Personal para abordar problemáticas que llevan ya tiempo demorándose como la culminación del proceso de desfusión hospitalaria, principalmente en lo que afecta a profesionales de distintas categorías del Hospital Infanta Elena que continúan trabajando en el Hospital Juan Ramón Jiménez, pero manteniendo sus nombramientos en el centro de origen.

A juicio del sindicato, y así se lo han trasladado al responsable del SAS a las puertas de la convocatoria de un nuevo Concurso de Traslados en el SAS, sería importante que se culmine el proceso de distribución de los recursos humanos, con especial hincapié en la situación de las adscripciones temporales del Área Materno-Infantil.

De igual forma, los representantes de Satse han expuesto a Fernández Rodríguez la problemática heredada de la falta de personal en algunas unidades hospitalarias, además de la surgida en las nuevas Urgencias del Hospital Infanta Elena, pues la ampliación y mejora de este área de Urgencias con la incorporación de circuitos diferenciados para patologías respiratorias, no ha supuesto un incremento adecuado de plantilla para atenderlas.

El secretario provincial de Satse ha incidido en la necesidad de dar estabilidad a los profesionales con contratos de larga duración para evitar la alta rotación que ocurre en centros como el Hospital de Riotinto.

Pese a reconocer el esfuerzo inversor de este gobierno en los últimos años, el Sindicato de Enfermería ha reclamado que se sigan realizando más mejoras en materia de infraestructuras de centros de salud de la provincia en los que, por ejemplo, se cuenta con una deficiente climatización, y el incremento en general de las plantillas para evitar casos como el Centro de Salud de El Portil en el que el personal sanitario tiene que hacerse cargo de las tareas administrativas.