Agentes de la Policía Local de Cartaya han salvado la vida a un caballo en una zona de marismas, en Cartaya, que había quedado atascado de medio cuerpo parta abajo en un lodazal. Según fuentes policiales, los hechos tuvieron lugar a última hora de la tarde de este lunes en un regajo situado en una zona de marismas conocida como La Pontezuela, muy cerca del casco urbano, cuando una patrulla divisó "casi de refilón" la cabeza del caballo detrás de unos matorrales.

Al acercarse los agentes el punto exacto donde se encontraba el animal, comprobaron como éste tenía "atrapado medio cuerpo en el fango". Momentos después, según las mismas fuentes, apareció en el lugar el propietario del equino acompañado de otra persona, los cuales, junto con los agentes de la Policía Local y con la ayuda del vehículo policial "lograron remolcarlo hasta sacarlo totalmente del lugar".

Por otra parte, dos vecinos también de Cartaya recuperaron ayer una yegua y un caballo de su propiedad que les habían sido previamente robados de sus cuadras, las cuales se encuentran en una zona de corrales del municipio, muy cerca de sus viviendas. Según señaló a Huelva Información el propietario de la yegua, notó que el animal faltaba de la cuadra cuando fue a ponerle la comida durante la mañana de este lunes, observando que "tenía la cuerda cortada por dos o tres sitios porque se habrían llevado un trozo".

Acto seguido, el propietario de la yegua siguió las huellas de los cascos dejadas por el animal, además de avisar a un vecino para que le acompañase en la búsqueda, que concluyó en un paraje de Cartaya cercano al río Piedras y distanciado varios kilómetros de la cuadra. Allí localizó a su yegua atada en un pinar, junto a un caballo, que posteriormente identificó como del vecino de una cuadra cercana a la suya, regresando junto con los dos equinos hasta Cartaya.

El propietario de la yegua relató que en la misma zona de corrales donde se encuentra su establo, "han abierto más puertas de cuadras" en las últimas horas, por lo que la familia ha realizado un llamamiento a través de las redes sociales en el que advierten a los propietarios de caballos para que extremen las precauciones.