Rosario este sábado en el entorno de la Parroquia Mayor de San Pedro, en la capital onubense, con la Virgen de los Ángeles, en el marco del 75 aniversario de la bendición de la imagen, obra de Antonio León Ortega, y de su primera salida procesional por las calles de Huelva. La titular de la Hermandad de la Borriquita salió sobre parihuelas del templo, sede canónica de la cofradía, a las ocho y medio de la tarde, bajo un repique de campañas y entre una nube de incienso. Portada por hermanos de la Hermandad, Nuestra Señora de los Ángeles inició su recorrido avanzando lentamente por el porche de la Iglesia de San Pedro mientras el Grupo Coral de la Merced, que dirige Sergio Lazo, interpretó Cantad a María. La agrupación musical la ha acompañado durante todo el itinerario.

El primer misterio del rosario llegó una vez que la imagen estaba en la plaza de San Pedro. De ahí la comitiva prosiguió por el Paseo Santa Fe para continuar por la calle La Fuente, exornada con guirnaldas de flores de papel azules y blancas, conformando el itinerario Madreana y Plaza de la  Soledad para retornar por Jesús de la Pasión.

Un gran número de personas se ha congregado alrededor de la Parroquia Mayor de San Pedro y en distintos puntos del itinerario para poder ver pasar la comitiva.

En este rosario por las calles de la capital onubense, la hermandad ha querido recrear en la estética la estampa de las primeras salidas procesionales de Nuestra Señora de los Ángeles, cuidando para ello los más mínimos detalles como el exorno floral de la parihuela, para lo que se ha optado por flores silvestres como la cala, delphinium y flor de arroz de color blanco así como rosas de color rosa, rememorando con ello los primeros exornos florales en los pasos.

También en el ropaje de la Virgen de los Ángeles se evoca esos primeros años de la hermandad. Luce la imagen en este rosario una mantilla en la cabeza y su ráfaga más icónica, cincelada en metal sobredorado en 1958 por el orfebre Jesús Domínguez, rematada por doce estrellas y una cruz al centro y en su interior doce cabezas de querubines plateadas.

Para esta ocasión se ha elegido la Saya de Aparicio, confeccionada en 1950 en el taller de Esperanza Elena Caro con bordados procedentes de un traje de luces donado por el torero Julio Aparicio. Fue restaurada y pasada a tisú color salmón por José Antonio Grande de León en 2014. Fue éste uno de los primeros trajes bordados que lució la titular de la Borriquita. Para este rosario la saya va ceñida por un cordón con borlas, recreando así mediante los pequeños detalles la estética de los primeros tiempos de la cofradía.

No lleva rostrillo la Virgen de los Ángeles, sólo elaborado el pecho con blondas y pliegues, y un manto celeste bordado en plata sobre los hombros, es el manto bordado por las Madres Adoratrices. Está la titular de la Borriquita muy enjoyada, tal y como se estilaba en aquella época. Entre las joyas, de manera excepcional, luce unos pendientes de amatistas, que llevaba en esos primeros tiempos. En la mano sujeta una rosa de color rosa.

En este rosario se les ha ofrecido la oportunidad a todos los hermanos de la cofradía de poder portar a la titular durante uno de los tramos del recorrido, en una fecha clave para la hermandad.