Huelva, "tierra de los padres donde empecé a a aprender a estar en el mundo", protagonizó ayer la intervención con la que José Luis Gómez agradeció su premio como Onubense del Año 2015. Más que un discurso, regaló a la audiencia un relato que enmarcó en "una pequeña ciudad en el extremo suroeste de una gran península del continente europeo, asentada en un rincón privilegiado de su naturaleza, en la confluencia de dos ríos que van buscando, multiplicados en los brazos que les crecen, el mar". A ella y "a sus gentes" dirigió la mirada quien un día salió cargado de ilusiones y ahora vuelve siendo uno de los intérpretes y directores teatrales más admirados de Europa, convertido también en académico de una de las instituciones más respetadas del país: la Real Academia Española.

Realmente no se trata de un regreso a su tierra porque, como dejó claro, nunca se fue del todo. Por eso recibió emocionado un premio que representa la profunda consideración que le tienen sus paisanos, y en un alarde de ese "resplandor de modestia" que identifica en ellos, manifestó su gratitud "por el inmerecido honor que se me hace".

"Sé que hay un puñado de personas, quizá anónimas, que merece esta distinción, por su trabajo y su esfuerzo en mejorar la vida de esta ciudad, tanto o más que yo. Comparto con ellos el premio. A ellos se lo dedico. A ellos, mi reconocimiento personal", dijo.

La vigésimo séptima edición de la gala de entrega de premios Onubenses del Año, otorgados por los lectores de Huelva Información, se celebró ayer en el campus universitario de La Merced. José Luis Gómez encabezó ayer un elenco de siete personas e instituciones que representan la Huelva actual, la de mayor dinamismo de los últimos tiempos.

Y a todos los premiados tuvo en consideración Gómez, como exponentes de quienes, "casi clandestinamente, buscan en grupos, asociaciones particulares, iniciativas, un respiro que les haga sacudirse, si quiera sea por momentos, la soñarrera" canaria que recuperó de Unamuno para aplicarla también a quienes habitaron una ciudad que estuvo, "salvo en raras ocasiones, al margen de la Historia".

"Quizá la bondad del clima, o de la naturaleza circundante, imprimió a sus habitantes un buen ser duradero, una laboriosidad pacible sin urgencias. No parecía haber mucho que ganar ni demasiado que perder. Apegados a antiguas e incuestionables tradiciones y fervores, la curiosidad obligada que un día le llevó a enrolarse y descubrir nuevos mundos parecía ausente en el vivir de sus hijos", aseguró.

El actor destacó por ello a quienes "buscan a través de la cultura -casi suena mal ese término hoy-, del espíritu crítico -casi suena peor-, de impulsos empresariales insólitos, de una ciencia a menudo huérfana de apoyos, nuevas perspectivas de sí mismos y de su entorno".

"Cuando aprendí a estar en el mundo, en esa ciudad de la que les hablo, era de esos que, entonces, era mucho menos que ahora", aseguró. Y añadió una confesión: "Por todo ello vuelvo una y otra vez a reencontrarme con esos que, como yo antaño, quieren, hogaño, sacudirse la soñarrera. Esta ciudad -permítanme que les revele tan bien guardado secreto- es la nuestra, Huelva, tierra de los padres donde empecé a aprender a estar en el mundo".

Las palabras de José Luis Gómez cerraron un acto que contó con otros seis protagonistas, premiados en seis categorías por los lectores de Huelva Información.

Uno de los aplausos más cálidos fue para el doctor Juan Bayo, responsable del Área de Oncología del Complejo Hospitalario Universitario de Huelva, refrendando los cerca de 59.000 votos logrados en la categoría de Solidaridad y Valores Humanos, el mayor aval histórico entre todos los premiados en el certamen.

Emocionado, Bayo agradeció el apoyo de "pacientes y familiares que me han votado desde toda la provincia". Valoró que este premio llegue de manos "de mi ciudad, de mi gente y en una categoría como ésta", pero aseguró que es "de todo el equipo de la unidad de Oncología". Hizo un llamamiento general para "una mayor implicación" a todos los niveles, "para que sea menos el sufrimiento futuro", para acabar con la dedicatoria más especial: "A todos los pacientes que afrontan con esperanza su enfermedad. Son el mejor ejemplo para nosotros".

También fue muy celebrada la entrega al Liceo de Moguer, que se ha convertido en uno de los grandes referentes culturales y educativos de la provincia en los últimos años. Su director, Iván Macías, aseguró que se sienten "muy queridos en nuestra tierra", y lanzó su deseo de que "haya mucha música y cultura de Huelva que se exporte".

El alcalde de Puebla de Guzmán, Antonio Beltrán, y el hermano mayor de la Hermandad de la Virgen de la Peña, Manuel Carrasco, recibieron el premio a la romería puebleña en el apartado de Tradiciones Populares, mientras que Marta Garrido lo recogió en Deportes; José Manuel Andújar, en nombre del máster de drones, en Educación; y Manuel Sánchez, por Nutrición Center, en Economía y Empresa.