Preparados para ponerse bajo el paso

El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Andalucía ha puesto en marcha, por primera vez, en Huelva el Centro de Atención al Costalero con la colaboración del Ayuntamiento de Huelva y el Consejo de Hermandades y Cofradías, un servicio que se presta en el Salón de Chimeneas de la Casa Colón hasta el Viernes Santo, cuyo objetivo es velar por la salud de aquellos que se colocan bajo las trabajaderas. En él se lleva a cabo tanto una labor preventiva como asistencial, ofrece preparación previa a la salida procesional así como tratamientos para lesiones causadas portando a los titulares de las hermandades.

El centro cuenta con cinco fisioterapeutas trabajando diariamente de diez de la mañana a dos de la tarde. Desde que se puso en funcionamiento el Domingo de Ramos se han atendido a sesenta y cinco costaleros. Su coordinador, José Luis Borrallo, comentó que el Domingo de Ramos acudieron quince personas a las que se les hizo "un tratamiento de preparación", consistente en masajes de tonificación de la musculatura, y se les dio indicaciones de cómo deben ir bajo el paso, insistiéndoles en el hecho de que "no tomen alcohol".

Borrallo apuntó que el mayor número de atenciones fueron por cervicalgias, contracturas cervicales, sobrecarga en las extremidades inferiores ( gemelos y cuádriceps y tobillos), así como por molestias lumbares. Las sesiones son de aproximadamente media hora y, dependiendo de la patología, los costaleros pueden volver al centro para seguir recibiéndolas.

El centro funciona mediante cita previa y sólo atiende a aquellos costaleros que acrediten su condición mediante la correspondiente papeleta de sitio o certificado sellado por la hermandad.

El Salón de Chimeneas está dividido en dos áreas: de estiramiento y asistencial. En la primera se enseña a los costaleros cómo estirar la zona lumbar, los brazos, la zona cervical y las piernas". Aparte, se les recalca la importancia de potenciar la musculatura abdominal, "la gran olvidada". Según Borrallo, "hay que tenerla fuerte, con ello se consigue que la zona lumbar se lesione menos".

En el área asistencial se lleva a cabo terapia manual, algo de electroterapia y prescripción de ejercicios terapéuticos.

Las edades de los usuarios va de los veinte a los cuarenta años, "siendo el mayor promedio de veintitantos años", señaló el coordinador, que comentó respecto a la preparación del costalero, que "la cosa está cambiando, la gente cada vez es más deportista y se prepara". Aconseja que empiecen cuarenta días antes de iniciarse los ensayos, "que hagan actividades físicas que conlleven resistencia, actividades con poco peso, y que hagan estiramientos, que lo hacen poco".