El Polígono San Sebastián demanda más limpieza y la Policía de Barrio

Unos 8.000 ciudadanos de la capital residen en el Polígono San Sebastián, un barrio dispuesto en torno a la calle Galaroza, la de Pablo Ruiz Picasso y la Avenida de Palomeque que consta de catorce plazas y un laberíntico entramado de callejuelas que serpentean entre sus bloques de ladrillos vistos.

La candidatura presentada por el alcalde popular, Pedro Rodríguez, en los comicios municipales de 2007 obtuvo el apoyo mayoritario del vecindario de esta zona de Huelva, con un 46% del voto de los 4.139 ciudadanos que acudieron a las urnas.

Y lo hizo contra todo pronóstico, ya que la entonces presidenta de su asociación de vecinos, Isabel Delgado, gozaba de mucha influencia en la barriada y se apuntó a la lista socialista de Manuela Parralo. El hecho de que el PSOE obtuviera aquí 1.826 votos (44,1%) y se quedara sólo a 81 papeletas del PP sitúa al Polígono San Sebastián en el punto de mira de ambas formaciones, que se emplearán a fondo en carrera de las venideras elecciones locales (que se celebrarán en mayo) para metérselo en el bolsillo.

El presidente de la Asociación de Vecinos Polígono San Sebastián, Francisco Borrego -que recogió el testigo de su esposa, Isabel Delgado, al frente del colectivo-, observó que "ya se está viendo movimiento por el barrio, se nota que quedan pocos meses para las elecciones, pero también hay que acordarse en los casi cuatro años que ya hemos dejado atrás".

El balance de la última legislatura de Pedro Rodríguez al frente del Ayuntamiento deja su huella positiva en actuaciones como la construcción de la nueva plaza de la calle Galaroza o la remodelación de la Plaza de la Romera. La primera se incluía en la lista de 161 compromisos electorales del regidor municipal para los comicios de 2007, especialmente por que incorpora un parking subterráneo que "debía paliar los problemas de aparcamiento del barrio". No obstante, aseguró Borrego, la Empresa Municipal de la Vivienda "dejó en manos de una empresa privada" la construcción del aparcamiento y "se encareció mucho el precio de las plazas, que llegaron a costar 21.000 euros". El representante vecinal recordó que, a pesar de que el parking fue ejecutado "hace más de tres años, todavía no se ha abierto al público, con lo que los problemas de aparcamiento persisten".

Además, denunció que "la dejadez del Ayuntamiento" ha llevado a un espacio público tan moderno y premiado como éste -recibió en 2009 el Premio de Arquitectura Contemporánea del Colegio de Arquitectos de Huelva- a presentar una imagen "sucia, con los jardines llenos de malas hierbas y un parque infantil en mal estado".

Con respecto a la Plaza de la Romera, Borrego evidenció que "se ha hecho con el dinero del Plan E" y consideró que, aunque ha quedado "preciosa", si se hubieran usado materiales más económicos "tal vez se podrían haber reformado otras que también lo necesitan".

También con cargo al Plan E, el Ayuntamiento de Huelva está inmerso en la remodelación de las pistas deportivas del barrio, actuaciones que estarán listas a finales de este mes y que consisten en la rehabilitación de los vestuarios, la renovación del suelo, la carpintería, los sanitarios y las instalaciones de agua y luz, así como la colocación de un nuevo cerramiento.

Con respecto a la seguridad, el presidente de la AVV San Sebastián estima "insuficiente" la presencia de la Policía Local en el barrio. Vecinos como Josefa Rojas dejaron claro que "no es una zona insegura, pero si se les llama no vienen". Por ello, recordó que "ya va siendo hora de que se ponga en marcha la Policía de Barrio", eterna promesa popular que nunca se hizo efectiva.

En materia de limpieza, Francisco Borrego señaló que "cada vez vienen menos los barrenderos y eso se nota". José Antonio González apostilló al respecto que "es mucha la suciedad que se acumula debido a los excrementos de perros", y María Dolores Fortunata observó que "los contenedores no se limpian desde hace meses".

Si a ello se une que los jardines "están descuidados y hay árboles que nunca se podan", no es extraño que el vecindario haya detectado la presencia de "ratas que campan a sus anchas por el barrio". Finalmente, lamentaron el mal estado del acerado y el asfalto de las calles.