La Oración espera la actuación de Patrimonio en el manto

Es una de las joyas no solo de la Semana Santa onubense sino de las de toda Andalucía. El manto de Nuestra Señora de los Dolores, titular de la Vera Cruz y Oración en el Huerto está a la espera de someterla a un proceso de restauración, lo que supone una actuación de envergadura al tratarse de una pieza centenaria.

El delegado Territorial de Educación, Ciencia y Deporte, Vicente Zarza visitó ayer, en La Concepción, el rico patrimonio de La Oración deteniéndose, especialmente, en el manto realizado en 1905, con dibujos de José Ordóñez y hecho en hojilla de plata terciopelo de lyón burdeos.

En estos momentos Educación, a través de la Dirección General de Bienes Culturales, se ha comprometido a elaborar un informe de diagnóstico para evaluar el estado de conservación de la pieza que pretende, por un lado, valorar las necesidades de intervención y, por otro, determinar las pautas de restauración.

El hermano mayor Francisco Martín mostró su satisfacción, tras la visita, ya que "el delegado ha indicado que el manto es merecedor de una actuación y que así se lo trasladará en una reunión que tendrá con el director general de Patrimonio mañana", refiriéndose a este miércoles.

La idea de esta hermandad de Jueves Santo, es que el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH) participe en esta obra, ya que desde la hermandad se considera que estamos ante una auténtica obra de arte perteneciente al patrimonio cultural de la ciudad.

El manto fue alquilado a la Hermandad del Valle de Sevilla en 1919 y adquirido en 1920, según contrato que firma Antonio Mora Claros en una época en la que su esposa, Josefa Jiménez, dio un impulso grande a la corporación.

El manto costó 35.000 pesetas. La prenda queda estructurada en dos partes: una soberbia y espectacular guardilla y el interior del manto en sí mismo; el diseño es prácticamente único.

La pieza fue restaurada y pasada a nuevo terciopelo por el taller Sobrinos de Esperanza Elena Caro, en 1982, siendo el coste de esa restauración superior a los 3 millones de pesetas.

La complejidad y el desafío que supone la restauración del bordado se encuentran en la naturaleza de los elementos utilizados ya que son todos naturales, sin que albergue ningún componente sintético. De este modo, el propio paso de los años provoca sus efectos inevitables. Ante ello, la hermandad se encuentra ante un proyecto de años y de gran envergadura económica.

El objetivo de la Hermandad de la Vera Cruz y Oración en el Huerto se entronca en el horizonte de la coronación canónica de Nuestra Señora de los Dolores, que ha sido pedida recientemente al Obispado y que podría tener lugar dentro de un par de años.

La cofradía, además, mantiene su propósito de conservar su espléndido legado patrimonial; prueba de ello es la presentación, la semana pasada, de las bambalinas laterales que han sido restauradas por Rafael Infante de modo que el palio lucirá, este Jueves Santo, todo el juego completamente renovado.