Aunque el ministerio de Fomento no podía detallar ayer hasta dónde va a llegar en Huelva el recorte de 6.400 millones que se tiene que realizar en la inversión de su departamento en dos años, lo que está claro es que el anunciado retraso mínimo de un año llegará a los grandes proyectos de la provincia que aún están pendientes de comenzar: el trasvase del Condado, el Canal de Trigueros, la Presa de Alcolea, el desdoble de la N-435 o el aeropuerto. Y aún más, el AVE, que se había previsto comenzar (la infraestructura ferroviaria) el próximo mes de junio, según anunció el propio ministro de Fomento, José Blanco, en Huelva el pasado mes de febrero. Obras, todas ellas, sin las que se paralizará el desarrollo social y económico de la provincia si se tiene en cuenta que son las mismas que el sector empresarial ha venido reclamando desde hace años.

Ante el anuncio realizado ayer el ministro de Fomento, que dejó claro que el recorte "afectará a todas la comunidades y a toda la oferta pública", la vicesecretaria general del PSOE en Huelva, Antonia Moro, consideró que es "arriesgado hablar sin conocer los detalles de las medidas" y que, por tanto, "hay que esperar a que el Ministro concrete realmente cuáles serán las actuaciones que sufran retrasos". Lo que sí quiso dejar claro es que las medidas adoptadas por el Gobierno central son "responsables y valientes" y "responden a una situación complicada", y, por tanto, requieren un "gran esfuerzo y compromiso" por parte de todos los ciudadanos.

Más contundente y concreta se mostró la oposición, que no tiene dudas de que los recortes anunciados por Blanco castigarán especialmente a la provincia. Y por ello, el PP reclamará al Congreso que "indulte" a la provincia, mientras que IU entiende que "una vez más" Huelva será "sacrificada, como ya ocurrió con los Presupuestos Generales".

Las infraestructuras en Huelva, según el portavoz provincial de los populares, Guillermo García de Longoria, son "un asunto más social, como generador de empleo y desarrollo, que algo meramente estratégico". De ahí que entienda que "los onubenses no podemos hacer un sacrifico mayor que el resto de ciudadanos de otras provincias". Desde el PP se ve "especialmente preocupante" que se puedan caer de las previsiones actuaciones como la Presa de Alcolea (que lleva adjudicada más de un año y medio), el trasvase del Condado (aprobado por el Consejo de Ministros desde febrero de 2008), o el AVE, "cuyos tramos están en proceso de estudio pese a que el PP lo dejó en fase de estudio de impacto ambiental". Obras esenciales a las que se suman el aeropuerto, que después de siete años aún no tiene ubicación, y el desdoble de la N-435 "para el que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) contemplan cantidades con las que no se pueden comprar ni los carteles de obras".

Izquierda Unida tiene claro que el anuncio de Blanco supondrá un "auténtico freno" al desarrollo social y económico de la provincia. En ese sentido, el coordinador provincial, Pedro Jiménez, ha exigido que se aclare cuanto antes qué infraestructuras se van a ver afectadas, ya que "mucho tememos que dado el poco peso político que ha demostrado el PSOE de Huelva, nuestra provincia será sacrificada". Pedro Jiménez considera que detrás de este anuncio se esconde la renuncia a obras esenciales que "han sido anunciadas de manera electoralista en los últimos años". Para Jiménez no hay duda de que "estamos ante medidas claramente conservadoras y que garantizan con toda seguridad una etapa de decrecimiento económico".