Niños de distintas culturas y razas comparten un ve rano inolvidable

Aprender a compartir, a tolerar, a jugar con niños sin hacer discriminación de su sexo, edad y sobre todo de su raza, es lo que han aprendido durante todo el verano los alumnos y alumnas, de entre 4 y 12 años, matriculados en la escuela de verano.

Ayer se reunieron, una vez más, para compartir unas Jornadas de Puertas Abiertas en la Asociación El Ancla, situada en la barriada onubense del El Carmen. La responsable de estas actividades es la Fundación Secretario Gitano, que por tercer año consecutivo, ha organizado estas jornadas de actividades lúdicas, durante los meses de julio y agosto, de lunes a viernes en horario de 09:00 a 13:30.

Ésta es una iniciativa más, que forma parte de los distingos programas, que organiza la Asociación, la cual funciona desde los años 60 en España, en catorce comunidades autónomas. Incluso, en algunos países europeos.

En Huelva lleva ejerciendo desde el año 2007. Su objetivo no es otro, que contribuir a la mejora de la calidad de vida de los gitanos y por ahora ésta dando muy bueno resultados.

Sobre todo participa gente joven en los programas de empleo y formación. También posee convenios con más de veinte empresas, para que la etnia gitana puedan realizar prácticas y distintos cursos de formación.

Una idea de la misma fundación, que ha sido posible gracias a la subvención de la Delegación Provincial de Igualdad y Bienestar Social en Huelva. La matrícula es completamente gratuita, para que cualquier niño pueda participar. Pero sólo hay treinta plazas vacantes y en los tres años, muchos niños se quedan fuera. Para el próximo año, se espera tener unas instalaciones más grandes para que haya un mayor número de participantes.

Esta pensando también para aquellos que se quedan en la ciudad los mese de verano, bien porque los padres estén trabajando, o porque no puedan irse de vacaciones por motivos económicos o personales. Todo está pensado, tanto para los niños, como para sus padres.

El objetivo de esta actividad es que todos los niños y niñas gitanos y de otras culturas compartan su tiempo y aprendan juntos. Hoy, para ellos, el verano ha llegado a su fin con estas jornadas, donde han enseñado, muy satisfechos, los trabajos realizados en los distintos talleres, en una exposición. Tanto las manualidades, como los reportajes fotográficos (mientras hacían estas actividades) han sido expuestas en el Aula Intercultural Distrito III Ajilé de la Asociación El Ancla.

Durante el tiempo estival se han divertido con las clases de teatro, danza, lectura, manualidades con plastilina y otros materiales, talleres de jardinería, pintura, reciclaje, realización de pulseras, cocina, cine, medio ambiente, juegos en la piscina y también refuerzo educativos. Porque en en su particular verano, también ha habido tiempo para las obligaciones.

Todo ello culminó en la mañana de ayer, donde ofrecieron para sus padres representaciones de danza, teatro y lecturas de poemas reivindicando la paz. Para finalizar, una coreografía previamente ensayada, ha dado paso a la entrega de diplomas, con birretes incluido, el más puro estilo universitario, fabricado con cartulinas de colores. Sandra, Antonia y Gema son las tres monitoras, que han estado pendiente de los niños, entregando toda su sabiduría, cariño y apoyo. Unos talleres educativos, donde tanto las monitoras, como los alumnos han aprendido mucho. Algunos alumnos ha repetido la experiencia, porque estos días son imborrables en cualquier memoria infantil . Y aunque no estaban obligados a asistir, ni un día faltaban a la cita.

Según la Coordinadora Provincial de la Asociación Cristina Rosal "Gracias a iniciativas como ésta, es ya una realidad que los gitanos han mejorado sus niveles educativos. De hecho, muchos de ellos están escolarizados, algo muy positivo"