Muere un operario de Cespa tras ser atropellado por el camión de la basura

Trágico accidente en Viaplana. En la madrugada de ayer, en torno a las 3:30, tres operarios de Cespa -la empresa concesionaria del servicio de recogida de residuos sólidos de la capital- se disponían a recoger la basura apilada en los contenedores de la calle Manuel Sánchez de la barriada capitalina de Viaplana. Llevaban 12 años trabajando juntos, según confirmó a este diario el concejal de Infraestructuras en el Ayuntamiento de Huelva, Felipe Arias. El equipo realizaba desde hace lustros la misma ruta por el área de Isla Chica. Pero ayer todo se torció.

La única forma de recoger los residuos que se acumulan en los contenedores de Manuel Sánchez es entrando con el camión a la vía marcha atrás, puesto que "si entrara de frente, no podría virar en la otra esquina porque el giro es muy complicado, angosto", aclaró Arias. Esta fórmula es habitual en muchas calles de ésta y de otras ciudades, fundamentalmente porque "si no tendríamos que colocar los contenedores muy lejos de las casas de los vecinos de esas zonas estrechas".

La idea era recular por Manuel Sánchez, recoger la basura y salir marcha adelante hacia la transversal, la calle Moncayo. Pero prácticamente no dio tiempo a ejecutar el plan. Uno de los dos operarios que van a pie, J.L.B.C., de 44 años y padre de un niño de seis, "tropezó, resbaló o se desvaneció" cuando el vehículo empezó a dar marcha atrás.

Según Felipe Arias, el hombre, que llevaba 15 años trabajando para la empresa, iba caminando en paralelo al camión pero detrás de éste, con la mala fortuna de que se desplomó en la carretera y justo en la trayectoria del vehículo, que acabó pasándole por encima con las ruedas traseras. Desmintió así la versión inicial ofrecida por el 112, que mantenía que el fallecido viajaba en la parte trasera del camión, desde la que cayó al suelo. "No podía ir montado en los estribos porque estos tienen un sistema que detecta el peso de la persona y detiene automáticamente el camión", aclaró.

El servicio de emergencias 112 informó ayer de que hasta Viaplana se desplazaron efectivos del 061, pero que no pudieron más que certificar la muerte del trabajador de Cespa, así como de la Policía Local, Bomberos y la Delegación de Empleo. La Inspección de Trabajo, en connivencia con la Policía Nacional de Huelva, ya ha iniciado una investigación para esclarecer lo sucedido.

Minutos después del accidente se personaron en el lugar de los hechos agentes de la Policía Científica y de la Inspección, que realizaron in situ las comprobaciones sobre el cumplimiento de las medidas del Plan de Prevención de Riesgos Laborales de la empresa.

Los investigadores analizaron todos los sistemas de seguridad del camión y las condiciones técnicas de los elementos acústicos y luminosos que debe activar el vehículo cuando da marcha atrás. Además, este tipo de furgones incorporan un sensor que detecta cualquier elemento que se encuentre a menos de 40 centímetros del parachoques trasero, "pero también está elevado a la altura del mismo, a unos 50 ó 60 centímetros, con lo que no pudo alertar de que había un hombre caído en el suelo". A priori, parece que "funcionaron todos los sistemas de seguridad del camión, aunque será la investigación, que acabará en el juzgado, la que deba determinarlo".

Los compañeros del fallecido están "en estado de shock, completamente destrozados", apuntó Arias, quien visitó ayer, junto con el alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, y el senador Francisco Moro, a los familiares y amigos de la víctima en el tanatorio nuevo. El hombre, muy conocido en la capital porque sus padres regentan un histórico ultramarinos aledaño a la Plaza de San Pedro, será enterrado hoy, a las 11:30, en el cementerio de La Soledad.

Pedro Rodríguez expresó su pesar "y el de toda la ciudad", por la muerte de J.L.B.C. en un "desgraciado accidente". Asimismo, envió sus condolencias a toda la plantilla de Cespa, a la que envió todo su "apoyo y solidaridad".