Un pueblo se hace comunidad en el momento que conoce sus raíces; una provincia se une cuando su historia compartida forma parte del ideario colectivo. En Minas de Riotinto, de todos los elementos de su rico patrimonio, pueden ser tres los que destacan sobre el resto a la hora de vertebrar su sociedad actual: la mina, la Esquila y ser la Cuna del Fútbol Español.Hoy hablaremos de las razones que llevaron a esta localidad a ser reconocida con ese título honorífico, único e irrepetible.Con el establecimiento de la Riotinto Company Limited en la Cuenca Minera de Riotinto (1873) se produce una transformación política, económica, cultural y social. Aparecen nuevas costumbres, crece una nueva comunidad.Con su actitud paternalista y controladora surge una sociedad clasista que no diferencia las funciones laborales de la vida cotidiana; emerge una política liderada por caciques adaptados a los nuevos tiempos; despunta una moderna economía minera que sustituye a las explotaciones agrícolas y se manifiesta una cultura distinta, andaluza y británica, que saluda “dando hele”, que trabaja con el “gossan” y se refugia bebiendo “manguara”.En esos años de humos tóxicos y condiciones miserables, los mineros quedan muy pronto cautivados por uno de los aspectos culturales británicos más arraigados: el deporte. Y de entre todos, uno en especial: el fútbol.Para entenderlo es fundamental dirigirnos al Río Tinto English Club. En principio restringido a los técnicos varones de la RTCL, se centraba en la práctica y fomento de actividades deportivas y culturales propias de la sociedad victoriana nacida a partir de la Revolución Industrial y la reforma pedagógica de las Public School.Esta reforma organizó, mediante reglas, deportes como el cricket, el atletismo, el rugby y el fútbol, que fomentaban la cooperación, la confianza mutua, el sacrificio, la formación y el carácter.Las colonias británicas, y Riotinto lo era, no fueron ajenas a este paradigma social, desarrollando los primeros clubes allí donde se extendió su imperio. Desde 1873 con la llegada de la RTCL y, sobre todo, desde 1878 con la formación de este Rio Tinto English Club, el fair-play, las normas, el entrenamiento, la competición y la organización deportiva formaron parte del día a día de su personal británico.Localizado en la calle Sanz, Aquilino Delgado, Cinta Regalado y Alfredo Moreno, el gran investigador de los deportes británicos en la Cuenca Minera, nos indican en “Club Inglés de Bella Vista, 135 años de historia”, que: “desde un principio estaba dividido en cuatro vocalías que hacen referencia a los deportes más practicados en el año de su creación”: cricket, polo, foot-ball y lawn tenis.A partir de esta vocalía comienza su actividad organizada el Rio-Tinto Foot-ball Club (hoy desaparecido y que tiene como heredero al Riotinto Balompié) formado únicamente por jugadores británicos, diferenciándose del Huelva Recreation Club que, desde sus inicios en 1889, se abrió a la sociedad onubense incorporando a jugadores nacionales.La práctica deportiva estaba tan afianzada en la sociedad británica que, desde un primer momento, lo pusieron en práctica. De este modo, José Luís Domínguez y Rafael Cortes señalan en su obra “Minas de Riotinto, Cuna del Fútbol en España” de la Diputación de Huelva la constancia de un primer partido de fútbol en agosto de 1873 durante la festividad de San Roque, patrón de la localidad.Estas características culturales de la comunidad británica asentada, la creación del Rio Tinto English Club con el Rio Tinto Foot-ball Club en su interior y estos primeros acontecimientos futbolísticos son las que establecen allí la Cuna del Fútbol Español, marca y título honorífico motivo de orgullo para todos los onubenses.Se cumplen 150 años de un hecho histórico para algunos menor, pero que ha maravillado y seducido a todo un país. Cada vez que festejes el gol de tu equipo, recuerda: el primer gol fue en Minas de Riotinto (Huelva).