Manuel González será canonizado en el Vaticano el 16 de octubre

el anuncio | el papa francisco lo dio a conocer en el consistorio de ayer

Reconocido en Huelva por su labor social y educativa con los más necesitados, donde fue arcipreste y párroco de San Pedro

Imagen de Manuel González en la basílica de San Pedro de Roma, el día de su beatificación, el 29 de abril de 2001.
Imagen de Manuel González en la basílica de San Pedro de Roma, el día de su beatificación, el 29 de abril de 2001.
Eduardo J. Sugrañes Huelva

21 de junio 2016 - 01:00

Las campanas de la ciudad anunciaron a mediodía de ayer con repique de alegría la canonización del beato Manuel González García, que fuera arcipreste de Huelva y párroco de la Mayor de San Pedro. Manuel González destacó en su estancia en Huelva, de 1905 a 1916, en la atención a los más necesitados y, muy especialmente, por la promoción educativa con la creación de las Escuelas del Sagrado Corazón de Jesús, que hoy se mantienen en el Seminario Diocesano, en un proyecto con Manuel Siurot. Además de las que mantuvo durante mucho tiempo en el santuario de la Cinta y en El Polvorín, en la parroquia de San José Obrero, una escuela de la que más tarde se haría cargo de ella la Comunidad Teresianas.

Lo anunció el papa Francisco en el consistorio de la mañana. La fecha está dada: el domingo 16 de octubre será canonizado en la Plaza de San Pedro del Vaticano. En un acto en el que ya trabajan las Misioneras Eucarísticas de Nazaret, que mostraban su alegría. Así lo resaltaba la hermana María Rosa Pérez Melián, que forma parte de la comisión creada recientemente en Huelva para los preparativos de la canonización de Manuel González. "Hemos recibido la noticia con suma alegría, es un trabajo de mucho tiempo en el que hemos estado esperando con ilusión que se produjera este anuncio y hoy es una realidad", señala. La comunidad tiene en Huelva una casa que está dedica a diferentes tareas, además de la principal, que es la eucarística a través de la Unión Eucarística Reparadora, un movimiento laico que está en toda la provincia; además de asistir a la Casa de la Iglesia y de regentar la librería diocesana Welba, en la calle Concepción.

La hermana Ana María Palacios mostraba su alegría desde Palencia, una de las dos casas que tienen en esa ciudad las Hermanas de Nazaret. Viene trabajando desde hace muchos años en la causa de la canonización de Manuel González y en la jornada de ayer se encontraba muy feliz. Un expediente que se inició el 3 de mayo de 1952, por lo que ahora se muestran muy ilusionadas. "Hemos recibido la noticia con la mayor alegría, satisfacción y gratitud de toda la comunidad; nuestro padre ha querido escuchar la petición que le hacíamos para conseguir lo que él se merece y queríamos, pues aunque nadie dudaba de su santidad, nosotros queríamos que la Iglesia lo reconociera", señala. La hermana Ana María Palacios destaca que "don Manuel vivió toda una vida santa y hoy es una satisfacción y alegría, un reto para vivir la santidad suya".

En la actualidad la comunidad de Hermanas Eucarísticas Nazarena se encuentra repartida por diversas partes del mundo y la forman unas 500 hermanas. En España está en Huelva, Jaén, Palomares del Río, Sevilla, Málaga, Valencia, Zaragoza, Oviedo, Soria, Palencia, (aquí tienen dos casas), Tenerife y Las Palmas. Se encuentran en América, en Ecuador, Argentina, México, Perú, Venezuela y Cuba, además de en Mozambique.

La comunidad tienen en marcha un Fondo Solidario Beato Manuel González, para atender los distintos proyectos sociales que vienen realizando en los lugares donde está implantada.

Desde ya preparan la peregrinación a Roma y desean que desde Huelva se sume una importante peregrinación que se espera presida el obispo de Huelva, José Vilaplana Blasco.

Recientemente se presentó en la parroquia mayor de San Pedro el boceto de una escultura de Manuel González a la que se le dará culto en este templo, donde el futuro santo fundó la Obra para los Sagrarios Calvario, clave en su posterior desarrollo pastoral como obispo tanto en Málaga como en Palencia. Una imagen que realizará el escultor Martín Lagares, quien pretende presentarlo cercano a los pobres y con una inmensa labor social y catequética, que se une a su pasión por Jesús Sacramentado. El beato aparece junto a un niño, que representa al pueblo al que quiere acercar el sagrario, que señala con su mano izquierda, ya que la escultura se pretende ubicar en una hornacina cercana a la capilla del sagrario. Para sufragar el proyecto hay abierta por la parroquia una campaña de colaboración.

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