Juan Bayo ingresa en la Academia de Ciencias, Artes y Letras de Huelva

El doctor Juan Bayo Calero, coordinador del servicio de Oncología Médica del hospital universitario Juan Ramón Jiménez, ingresó ayer en la Academia de Ciencias, Artes y Letras de Huelva (Acalhu) en un acto celebrado en el Colegio Oficial de Médicos que coincidió con la inauguración del curso 2019/20.

La Academia de Ciencias, Artes y Letras es una institución incluida en el cuerpo de las Academias de España, en la que se integran personalidades de reconocido prestigio en cada uno de esos ámbitos. En el caso del doctor Bayo, los académicos Antonio Sánchez Pajares y Antonio Pereira Vega, "mis padrinos", fueron quienes presentaron al pleno su candidatura, avalada por la calidad de su persona, su curriculum y su reconocimiento por la sociedad onubense, siendo la aceptación unánime.

El doctor Bayo lo recibió como "un gran honor" y dedicó su ingreso en la institución a sus cuatro hijos, su esposa y a su equipo de enfermeros y médicos (presentes en la toma de posesión), al tiempo que se comprometió a "mejorar la repercusión social de la Academia" a través de los medios de comunicación y su "onubensismo".

Su discurso de entrada versó sobre El desafío tecnológico en la medicina del siglo XXI y fue respondido por Antonio Pereira, neumólogo del Juan Ramón y académico de número de Acalhu.

En la disertación, el doctor Bayo evidenció el impacto del desarrollo tecnológico de nuestra sociedad en la Medicina. El médico los considera elementos "antagónicos", porque pese a que los avances de la Era Digital han contribuido a una revolucionaria mejora de la Ciencia, también han "desnaturalizado la relación médico-paciente", su "cara B".

Así, hizo un repaso a las contraprestaciones de este mundo ciberconectado para la salud, reparando en su especialidad, el cáncer, sobre el que Google ofrece más de mil millones de referencias informativas de las que "el 90% es falso o confuso".

Y esto lleva a los especialistas médicos a toparse con pacientes y familiares "autodiagnosticados, automedicados o siguiendo pseudoterapias" que no les hacen ningún bien.

El oncólogo puso sobre la mesa la cibercondría, "que es la obsesión tecnológica por la salud", habló de los pros y los contras de la telemedicina y expuso un supuesto hipotético pero nada ilusorio: una web en la que se daba un diagnóstico informatizado a un paciente de cáncer con escasa esperanza de vida y en la que aparecían anuncios de una funeraria, como ejemplo de un futuro mundo robotizado y deshumanizado.

El nuevo académico cuenta con una dilatada y prolífica vida profesional. Onubense de nacimiento, tras su período inicial de formación (licenciatura en Medicina y especialista en Oncología Médica) en Sevilla, desde 1998 ejerce su profesión en Huelva y actualmente es el coordinador del servicio de Oncología Médica en el hospital Juan Ramón Jiménez.

Su currículo incluye múltiples ponencias, comunicaciones a congresos nacionales e internacionales, capítulos de libros, publicaciones de impacto, diversos premios y la coordinación de numerosos ensayos clínicos y proyectos de investigación, incluyendo el registro de una patente en el área biomédica. Y también el premio Onubense del Año de Huelva Información, que lleva a gala por donde quiera que va.

Visiblemente emocionado y arropado por compañeros y autoridades, Juan Bayo Calero recibió la medalla que lo convierte en miembro de la Academia.

Esta, además, otorgó los Premios Jóvenes Investigadores 2019/20 a Melissa García (Ciencias) y Santiago del Rey (Letras). Este último puso de manifiesto las dificultades de los investigadores para conseguir un trabajo estable y agradeció el galardón porque "es un estímulo para seguir cultivando esta senda, llena de retos que ayudarán a hacer mejor este mundo que habitamos".