La portavoz de Adelante en el Ayuntamiento de Huelva y coordinadora local de Izquierda Unida, Mónica Rossi, ha calificado como “muy mala noticia para Huelva” la decisión del Ministerio de Transición Ecológica de otorgar la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) al proyecto de Fertiberia en las balsas de fosfoyeso.

Rossi ha añadido, a través de un comunicado, que este anuncio “es una prueba de la falta de compromiso histórico” de todas las administraciones con Huelva para la búsqueda de soluciones alternativas satisfactorias para lograr la restauración de las 1.200 hectáreas de marismas sepultadas bajo las balsas de fosfoyesos generadas por Fertiberia.

Rossi ha declarado que el proyecto de Fertiberia “no responde a las aspiraciones de la ciudadanía de Huelva, como se ha demostrado a largo de los años por medio de movilizaciones ciudadanas y del acuerdo y consenso de las diferentes fuerzas políticas y sociales en las instituciones onubenses y en la calle con la gran manifestación del 3 de diciembre de 2015”.

Esta decisión “supone un duro golpe” al trabajo que se realiza por parte del Comité de Expertos, auspiciado por la Mesa de los Fosfoyesos, y un “menosprecio” al mismo, en el que “hemos estado participando activamente junto con más partidos, organizaciones e instituciones para tratar de sacar adelante un proyecto de máximos, con el que la ciudad de Huelva pueda recuperar sus marismas”.

En este sentido, Rossi denuncia una vez más “la falta de compromiso real de todas las administraciones que, a la hora de la verdad, no han puesto los recursos económicos necesarios para facilitar el trabajo de los expertos y que hubiera hecho posible disponer de proyectos alternativos al presentado por Fertiberia”.

Así las cosas, “Fertiberia se está saliendo lamentablemente con la suya, al no haber un proyecto alternativo que sirva para restaurar las balsas de fosfoyesos de un modo mucho más ambicioso y beneficioso para la ciudad de Huelva”.

Rossi señala que “ante estos hechos, pedimos la unidad de todas las fuerzas políticas y sociales de Huelva para hacer frente a esta decisión porque esta ciudad no se merece ni quiere esto, y para lo que serán necesarias más movilizaciones en la calle y acuerdos institucionales que se cumplan realmente, aportando medios para obligar a la empresa contaminante a destinar los 65,9 millones de euros de su condena a restaurar las marismas con un proyecto de máximos y que responda a las expectativas de Huelva”.