La imagen de la Inmaculada recorre en su festividad las calles del centro de Huelva. Minutos antes de la salida procesional desde la céntrica Iglesia de la Concepción, la Hermandad de la Inmaculada hizo público el nombramiento de hermano honorario de la Banda de Música Maestro Tejera. El director de la agrupación musical, José Manuel Tristán, acompañado por su hija, María del Mar, recogió ante el paso el documento enmarcado que lo acredita. 

La hermandad quiso tener este gesto con la banda por "su vinculación y trayectoria". Tristán apuntó que "me quedo sin palabras, esto es un tesoro". Desde hace unos dieciocho años la agrupación musical acompaña a la imagen de la Inmaculada en su salida procesional, para la que la banda cede el llamador del paso, "es una hermandad muy especial para nosotros".

La primera procesión que hizo la Banda de Música Maestro Tejera tras la incorporación de la primera mujer en la misma después de cien años de historia, fue la de la Inmaculada. En noviembre de 2008 pasó a formar parte de la agrupación musical María del Mar Tristán, que toca la flauta travesera, y en diciembre acompañaban a la Patrona de la Diócesis de Huelva por las calles de la capital onubense.

Antes de la salida procesional, el obispo de Huelva, Santiago Gómez, se dirigió a los presentes e indicó que "es un día grande, la Inmaculada es Patrona de España y de la Diócesis de Huelva". A ella le encomendó "la patria, la unidad, la solidaridad entre los pueblos, la paz y la concordia" y también le pidió por la Diócesis de Huelva". Fue su oración evocadora del momento de la encarnación "del hijo de Dios". 

A las cinco de la tarde, la cruz parroquial salió por las puertas de la Parroquia de La Concepción. Dentro del templo, el capataz del paso, Gonzalo Rey, en la primera levantá, instó a los costaleros a "tirar desde el suelo con mucha fuerza para arriba". Poco a poco, con solemnidad, el paso de la Inmaculada, exornado con flores blancos, fue avanzando por el interior del templo al son de la marcha Sine Labe Concepta, de Jesuli Perojil. A las cinco y trece minutos el paso ya estaba en la calle, mientras se oía de fondo el Himno de España.

Fuera, un nutrido grupo de personas aguardaba para ver salir a la hermandad. Con aplausos respondieron a la primera levanta del paso ya en la vía pública. Con la marcha Coronación de la Macarena inició su procesionar por las calles del centro. A lo largo del itinerario, esperaban ciudadanos para verla pasar y algunos que paseaban por la zona se pararon también para contemplarla.

Uno de los momentos más emotivos de la procesión tuvo lugar ante el convento de las Hermanas de la Cruz. Un gran número de ciudadanos se concentró en la Plaza Niña para presenciarlo, entre los presentes se encontraba el autor de la imagen de la Inmaculada, Mario Moya. A las siete menos cuarto de la tarde se abrió la puerta del convento, y cuando la Virgen avanzaba por el lateral de la Plaza Niña para su encuentro con las Hermanas de la Cruz se encendieron las luces de Navidad de la ciudad, iluminándole el camino.

El paso se acercó hasta las puerta del convento meciéndose. Una vez que se paró, las monjas le rezaron a la Inmaculada en forma de cántico. A las religiosas se le dedicó una levantá, "por esos ángeles que dejó el Señor en la ciudad de Huelva, que están siempre para quien lo necesita".

Al mediodía, ante el monumento a la Inmaculada, en la plaza de la Veracruz, la Banda de la Expiración, Salud y Esperanza y militares del antiguo Regimiento de Infantería Granada 34 realizaron una ofrenda de flores y la agrupación musical interpretó Los Gozos. Entre los asistentes se encontraba la Comisión del Monumento a la Inmaculada, que preside Eduardo Sugrañes, así como los  sacerdotes Diego Capado y Carlos Javier Rodríguez, actual párroco de La Concepción, que fue el encargado de impartir la bendición.