Inditex deja Aqualon y trasladará sus tiendas al centro comercial Holea

La crisis y la inminente competencia lo pusieron en la encrucijada de renovarse o morir, pero el centro comercial Aqualon Puerto se topa con un fuerte varapalo de cara al otoño, además de proseguir con el multicines en concurso de acreedores: el Grupo Inditex confirma a este periódico lo que desde hace meses pulula en la rumorología, aclarando que la apertura de siete de sus tiendas en el centro comercial Holea conlleva el cierre de las que llevan nueve años abiertas en Aqualon. Establecimientos que ocupan el 25% de la superficie del centro comercial de la zona portuaria, cuyos operadores han ido cayendo como fichas de dominó.

Del Muelle de Levante Norte, Inditex se traslada a la Ronda Exterior, dejando en el entorno de la Placeta y la Concepción su otro foco de implantación en el ámbito de la capital onubense.

Como ya había anunciado el grupo de origen gallego de forma oficial, se ha apostado claramente por el proyecto de Carrefour Property, que se inaugurará a mediados de noviembre junto al hipermercado de esta misma compañía. Así, Inditex ocupará en Holea un total de 6.400 metros cuadrados con Zara, Massimo Dutti, Oysho, Stradivarius, Pull and Bear y Bershka. Todas firmas presentes en Aqualon, cuyas plantillas serán trasladadas al nuevo centro comercial, al margen de los puestos de trabajo adicionales para los que el grupo está haciendo selección de personal.

Asimismo, en Holea aterrizará Lefties, que no cuenta con ningún establecimiento en Aqualon, abriendo en época más reciente en la céntrica calle Berdigón en el local del Cine Emperador. En principio, esta tienda del entorno del casco histórico permanecerá abierta. Fuentes de la compañía apuntaron que son las de Aqualon las que se trasladan a Holea. De hecho, el grupo de Amancio Ortega ha hecho algunas reubicaciones en los últimos tiempos dentro de la zona Centro -como es el caso de Stradivarius o Massimo Dutti- para optimizar el alquiler de locales, aprovechando las oportunidades que ha dejado la crisis.

Una dinámica que pone a Aqualon definitivamente en la picota, a expensas de la reinvención. Pese a la confirmación por parte de Inditex de que en noviembre cerrarán sus locales (en julio ya cerró el de Zara Home), desde la gerencia de Aqualon no tenían días atrás una noción clara de en qué medida afectaría la apertura de Holea a una de sus locomotoras comerciales. La otra locomotora, el multicines, sigue pendiente de la negociación por parte del Grupo Ábaco con varias distribuidoras ofertantes para abordar el traspaso. En juego están 12 puestos de trabajo. El panorama del Cinebox Aqualon se verá condicionado a corto plazo por la competencia de las salas de última generación que la operadora Arte 7 está instalando en Holea con una inversión de 4,5 millones de euros. Sin embargo, en las negociaciones que Ábaco está llevando a cabo a nivel general, el cine de Huelva se considera uno de los más rentables (o menos deficitarios, habida cuenta del panorama).

Por lo demás, el centro comercial espera remontar con el proyecto de un gimnasio low cost que se habilitaría a partir de enero en el local que en un principio ocupó el supermercado, con una superficie de casi 2.000 metros cuadrados.

La gerencia confía en que la gasolinera que se ha construido en la parcela de Aqualon -junto a la Escuela Náutico-Pesquera-, con descuentos para los clientes del centro comercial, sea otro de los alicientes, así como la peluquería que L'Oréal va a abrir en los próximos días en el local que albergara la franquicia Marco Aldany.

Ahora con la jarra de agua fría de la marcha de Inditex, Aqualon prepara distintas iniciativas para dinamizar el edificio que se inauguró en la Glorieta Norte hace casi una década, en plena bonanza económica. Nació como una de las operaciones clave en el convenio Puerto-Ciudad, destinado a acercar Huelva a su Ría. Fue el primer proyecto terciario que aunó comercio y ocio en la capital onubense, concibiéndose además como reclamo arquitectónico y permaneciendo desde hace varios años como el único multicines que queda en la ciudad tras los cierres encadenados del Fantasio, La Dehesa, Rábida y Emperador.

Con la progresiva caída del consumo, los comercios fueron sucumbiendo. La estrategia de supervivencia de Aqualon lleva ensayándose desde que hace un par de años el complejo comercial fuera adquirido por el grupo empresarial venezolano Mantex Metrópolis, tras una etapa de agonía por el concurso de acreedores del anterior propietario, GMR. Más de 24 millones de euros invirtió en 2004 esta empresa en un edificio de 17.000 metros cuadrados, pero siempre hubo, como mínimo, una veintena de locales sin arrendar de un total de 85.

Desde la gerencia de Aqualon se confía en que el proyecto de remodelación del Muelle de Levante Norte que impulsa la Autoridad Portuaria -que convertirá la zona de la lonja en un foco de ocio y hostelería- suponga un acicate para este sector de la capital para relanzarse como balcón fluvial y nodo de actividad comercial.