La Iglesia asegura que ya abona IBI por inmuebles no dedicados al culto

Ante la polémica surgida por la iniciativa del Partido Socialista de presentar mociones en todos los ayuntamientos del país solicitando que las distintas confesiones religiosas paguen el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de los edificios no dedicados al culto, la Iglesia aclara que ya abona el IBI y las tasas municipales que le corresponden por ley.

Desde la Diócesis de Huelva se asegura que se paga el Impuesto de Bienes Inmuebles correspondiente a cincuenta y siete bienes de titularidad diocesana ubicados en la capital onubense y provincia, entre los que se encuentran solares, parcelas en suelo rústico y garajes, a lo que añade que los de titularidad privada de miembros de la Iglesia, como puede ser la vivienda particular de un sacerdote, están igualmente sometidos al régimen fiscal.

Subraya que lo que no se abona es el IBI de aquellas propiedades que están exentas en base al acuerdo internacional entre el Estado y la Santa Sede, el conocido como Concordato; la Ley de Mecenazgo o la Ley de Patrimonio, destacando en relación a la Ley de Mecenazgo que la Iglesia no dispone de un régimen fiscal privilegiado sino que se rige por el mismo que se aplica a otras instituciones no lucrativas del país y al resto de confesiones religiosas.

La Diócesis de Huelva recalca en relación a los inmuebles exentos del pago del IBI que "ninguno de ellos tiene un fin lucrativo". Explica que el objetivo de los mismos es que la Iglesia pueda alcanzar sus propios fines: "Transmitir la fe anunciando la palabra de Dios; celebrar la fe manteniendo el culto y testimoniar la fe, especialmente a través del ejercicio de la caridad".

En la provincia de Huelva hay 516 inmuebles de titularidad diocesana, según datos de la Diócesis, de los cuales 102 se encuentran en la capital onubense. De 57, el 11% del total, se paga el IBI, estando los bienes restantes exentos, la mayoría de ellos en base al acuerdo entre la Iglesia y el Estado, excepto 7, todos ellos ubicados en la provincia, que funcionan como cementerios municipales en localidades donde no los hay, que se acogen a la Ley de Mecenazgo 2002, así como 47 edificios, 4 en la capital onubense y 43 en la provincia, declarados Bien de Interés Cultural, que no abonan IBI conforme al artículo 69.1 de la Ley de Patrimonio 1985.

El mayor número de edificios exentos del pago del IBI son templos dedicados al culto, un total de 229, el 44,3%, (parroquias, ermitas, capillas y conventos); seguidos por inmuebles de uso residencial, 97, (casas parroquiales, viviendas de religiosas y el Seminario); centros pastorales, 47, (servicios parroquiales, centros juveniles, centros de espiritualidad y servicios de Cáritas parroquiales); centros asistenciales, 22, (residencias, guarderías, centros de rehabilitación de drogodependientes...) y centros de educación y cultura, 9, (colegios, centros de formación y de cultura), un conjunto de inmuebles que se completa con el edificio del Obispado de Huelva.

La Diócesis onubense indica que si hay cambios acatará la ley y seguirá desarrollando su cometido en todas sus facetas, "aunque suponga una mayor dificultad, y siempre con la colaboración de los fieles, porque la Iglesia vive comprometida con el Evangelio que anuncia".

Manifiesta que la Iglesia de Huelva es depositaria de un importante patrimonio histórico artístico que se ha ido generando a lo largo de los siglos, un patrimonio que no valora como "fuente de negocio" sino como un bien cultural que administra "al servicio de todos" y que "lejos de ser económicamente rentable exige de un cuidado, generalmente, de cuantioso gasto".

Por otra parte, dice que no es ajena a la situación de crisis, de hecho la sufre "ajustando sus propios recursos a las necesidades para poder llevar a cabo sus fines". Afirma que hace un verdadero esfuerzo, especialmente a través de Cáritas, para atender a una creciente demanda social. En este sentido, agradece la generosidad de "muchos voluntarios, donaciones, colectas y aportaciones de católicos y personas" que confían en la labor que ésta realiza, "marcando la X en la casilla de la Iglesia Católica de la declaración de la Renta". Destaca que esta aportación se ha incrementado en los últimos ejercicios.