Huelva sigue en La Ribera
Juan Antonio Mendoza · Propietario de bar
Juan Antonio Mendoza Tamayo tiene 29 años y ha vivido toda su vida en el barrio de La Ribera. Allí es dueño del bar que lleva su apellido y que ya lo regentaron sus padres. A mí me llamó la atención una cosa cuando entré y es que Juan Antonio repartió entre los que estábamos, calendarios del próximo año. Uno que tiene memoria, recuerda que ésta era una costumbre muy habitual hace unos años y desgraciadamente ha ido cayendo en desuso lo que es a fin de cuentas, toda una atención al cliente.
Me cuenta que el suyo es el único bar de La Ribera, una zona tranquila de la ciudad en la que el campo, la tranquilidad se percibe: "La ventaja de La Ribera es que se vive muy tranquilo y estás al lado de Huelva al mismo tiempo". Me comenta que es un barrio en auge en el que se ha construido una nueva urbanización y hay proyectos para otras dos con lo que la vida y el futuro del barrio están asegurados. Aparte de la tranquilidad, La Ribera no deja de estar bien comunicada y ve con optimismo que cerca de la Ciudad Deportiva van a abrir un nuevo centro comercial.
Afortunadamente a Juan Antonio no le falta el trabajo. Presta servicio a los vecinos del barrio, a los trabajadores de las empresas y las obras que hay alrededor y los fines de semana le llega un buen número de clientes de Huelva para disfrutar de su comida tradicional y casera donde hay platos tan suculentos como el revoltillo o las carrilleras. Ahora de cara a Navidad, Juan Antonio tiene preparados menús de empresas y seguro que demanda no le va a faltar.
Volviendo a la vida en La Ribera comenta que se encuentra un poco desasistida ya que no hay ninguna oficina del Ayuntamiento por lo que todo el papeleo tiene que ser gestionado en Huelva. Por lo que respecta a la atención médica, el consultorio abre los viernes. Pese a ello, a Juan Antonio nunca se le ha pasado por la cabeza dejar su casita de campo y marcharse a otro barrio de Huelva y meterse en un piso. Además, cuando el trabajo se lo permite se dedica a una de sus aficiones preferidas: los caballos, con los que recibe clases de Pedro Calero.
Sobre si nota los efectos de la crisis, Juan Antonio comenta que "a mí me sigue entrando mucha gente aunque se nota que se retraen algo a la hora de pedir".
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