Huelva registra 728 robos en viviendas en los primeros nueve meses del año, lo que supone un incremento del 11,7% respecto al mismo periodo del año anterior, el mayor porcentaje de subida de Andalucía, según datos del balance trimestral de criminalidad del Ministerio del Interior. No obstante, la onubense se encuentra entre las provincias andaluzas en las que menos sustracciones en domicilios se producen, sólo por encima de Jaén, donde se llevaron a cabo 581 robos, un 1,4% menos que en 2022.

En la comunidad andaluza se perpetraron 10.412 robos con fuerza en viviendas de enero a septiembre, un 2,7% más que en 2022. Málaga, con 2.559, y Sevilla, con 2.323, son las provincias donde más sustracciones se cometieron, incrementándose en un 0,4% y un 7,8% respectivamente, seguidas de Cádiz, con 1.185, con un descenso del 1,75; Almería, con 1.148, con una bajada del 2,6%; Granada, con 1.126, con una subida del 3,7%, y Córdoba, con 762, con un incremento del 5,4%.

Los robos en las viviendas españolas descienden un 2,6% en los nueve primeros meses del año, con 62.147 frente a los 63.799 de 2022. Cataluña con 13.939 robos, la valenciana, con 10.431 y Andalucía, con 10.412, son las comunidades con mayor número de sustracciones, aunque en las dos primeras hay un descenso del 5,3% y del 3%, respectivamente. Asturias es en la que se ha producido un mayor crecimiento, con un 30,1%, cifrándose en 734 los robos.

En cuanto a municipios, Salamanca es donde más se han reducido los robos en viviendas, hasta un 38,2% menos, seguida por Teruel, con un descenso del 30,7%; de Valladolid, con un 29,8%; Álava, con un 29,6% y Vizcaya, con un 23,9%.

Desde la Unión de Cerrajeros de Seguridad (UCES) indican que "la gran mayoría de los robos cometidos en los hogares españoles se producen durante los desplazamientos de corta duración de los propietarios". Señalan que "este macropuente de la Constitución, como otros puentes, supone un abandono temporal del domicilio familiar y una oportunidad para los ladrones, ya que casi el 40% de los robos en hogares se producen en desplazamientos entre uno y tres días".

Según José Luis García de Vicuña, presidente de UCES, “la instalación de una cerradura anti-ganzúa, anti-bumping o anti taladrado a través, siempre, de un profesional acreditado es una solución económica que nos ofrece mucho a cambio”.

La UCES aconseja cerrar la puerta siempre con doble vuelta, aunque sea por espacios breves de tiempo; evitar dejar señales que indiquen que la vivienda está desocupada y no dejar las llaves escondidas en los alrededores de la casa; instalar una cerradura que disponga al menos de tres puntos de anclaje al marco de la puerta (superior, inferior y lateral) y preferiblemente colocar una puerta blindada con al menos dos puntos de cierre y no dejar hueco entre la puerta y el suelo.

En cuanto a las viviendas unifamiliares, recomienda mantener cerradas las puertas del jardín y del garaje, además de la principal; instalar persianas en todas las ventanas y balcones y proteger con rejas las ventanas de fácil acceso desde el exterior y que la separación de los barrotes sea menor de doce centímetros.