El Ministerio para la Transición Ecológica ha publicado en su página web el Informe de Evaluación de la Calidad del Aire en España, con los datos de 2018 que, en el caso de la capital onubense, constata que no se han registrado episodios de superación de los niveles legislados para los contaminantes estudiados a excepción del ozono troposférico (03), que es un contaminante secundario que se forma a partir de reacciones fotoquímicas complejas por la “alta insolación y la emisión de sus precursores (principalmente óxidos de nitrógeno y compuestos orgánicos volátiles)”.

Según el informe, consultado por este periódico, en tres años el número de superaciones de 120 microgramos por metro cúbico ha sido de 29, una situación que se da en la “estación La Orden” –calificada en el informe como “urbana industrial”, así como en las estaciones “rurales de fondo” de El Arenosillo y Matalascañas, donde se superaron en 34 y 30 ocasiones.

La mitad sur de España por lo general, y parte de Valencia y Cataluña muestran niveles altos y se detectaron superaciones en la media anual de ozono para la protección de la salud en las zonas de Córdoba, la industrial de Carboneras (Almería), Granada y área metropolitana, o la nueva zona de Sevilla y área metropolitana, entre otras.

En el país el ozono troposférico sigue mostrando en 2018 niveles elevados en zonas suburbanas o rurales, debido en gran medida a la alta insolación y a los niveles de emisión de sus precursores. Según el informe, la situación es muy similar a la de años anteriores, si bien se aprecia una pequeña disminución en el número de zonas que superan el valor objetivo para la protección de la salud (pasan de 36 a 35).

Según el informe nacional, la alta presencia del ozono troposférico en el aire en España ha sido relacionada con la mortalidad (general y por causas cardiovasculares y respiratorias), el bajo peso de nacimiento de los bebés y la demencia.

Y señala que “aunque es ampliamente conocido que el mayor efecto del O3 se da en el aparato respiratorio, no se han realizado estudios en España que lo relacionen con enfermedades y efectos adversos de este sistema”.

Además del ozono troposférico, los resultados del informe, que tienen un carácter oficial, evalúan una serie de contaminantes: dióxido de azufre (SO2), dióxido de nitrógeno (NO2), óxidos de nitrógeno (NOx), partículas (PM10 y PM2,5), plomo (Pb), benceno (C6H6), monóxido de carbono (CO), arsénico (As), cadmio (Cd), níquel (Ni) y benzo(a)pireno (B(a)P).

Todos los datos serán trasladados por el Gobierno de España a la Comisión Europea antes del 30 de septiembre.