Huelva encabeza el crecimiento de la energía eólica en Andalucía

Energías renovables La provincia sigue sumando instalaciones eólicas y fotovoltaicas

La provincia sumó en 2010 un parque, hasta llegar a 335,85 megavatios de potencia instalada · Esa cifra es suficiente para abastecer a unos 200.000 hogares · No obstante, es la tercera por la cola en la comunidad

Algunos de los molinos del complejo eólico El Andévalo, propiedad de Iberdrola.
Algunos de los molinos del complejo eólico El Andévalo, propiedad de Iberdrola.
Raquel Montenegro / Huelva

20 de marzo 2011 - 01:00

Huelva sigue avanzando posiciones en el mercado de la energía eólica y es, por segundo año consecutivo, la provincia andaluza que más potencia instalada suma. En 2010 se puso en marcha un nuevo parque eólico en el Andévalo (Los Lirios, en San Silvestre de Guzmán), que impulsó el aumento de 288 a 335,85 megavatios de potencia instalada para la generación de electricidad gracias a la fuerza del viento. No obstante, Huelva sigue en la cola de la comunidad en este tipo de instalaciones, sólo por delante de Sevilla y Jaén pero acercándose cada vez más a Granada.

La provincia onubense aglutina con sus once parques el 11,27% del total de la potencia eólica andaluza (2.980 megavatios), con un progresivo crecimiento en la última década. La revolución eólica comenzó en 2003, cuando la Junta de Andalucía hizo un reparto de la capacidad de evacuación y autorizó la instalación de 462 MW de potencia en quince parques: cuatro de ellos están por poner en marcha. Y de los restantes once, ocho forman parte del complejo eólico El Andévalo (es decir, están controlados desde una misma sala). Propiedad de Iberdrola, es el mayor de complejo de Europa Continental y fue inaugurado oficialmente hace unos días.

Hasta ahora, Huelva cuenta con esos 335,85 megavatios que, aunque suponen menos que un solo grupo de ciclo combinado (la central de Endesa en la Punta del Sebo, por ejemplo) son suficientes para abastecer a unos 200.000 hogares, es decir, 600.000 personas, 100.000 habitantes más de los que tiene la provincia de Huelva. Todos ellos instalados en el Andévalo; el pasado viernes, la Consejería de Medio Ambiente otorgaba la Autorización Ambiental Unificada al primer parque eólico de Aracena.

De esta forma, la provincia va avanzando hacia ese 15% del total de la energía eólica instalada en Andalucía que se planteaba inicialmente. Condiciones no le faltan, aunque, según los datos de la Asociación de Promotores y Productores de Energías Renovables de Andalucía (Aprean) es superada de lejos por Cádiz, que con sus fuertes vientos suma 1.252,25 megavatios de potencia, el 42% del total andaluz. Málaga y Almería se sitúan en el entorno de los 460 megavatios, mientras Granada supera por poco a Huelva con 349,3 MW.

En total, los 2.980 megavatios de Andalucía la sitúan en el cuarto puesto de las comunidades autónomas, después de un año en el que el crecimiento ha sido mínimo (un 4,92%) respecto a 2009. Se trata de la menor tasa de aumento registrada en la historia de la eólica debido al parón provocado por la entrada en vigor del registro de preasignación, que ha dejado fuera a un elevado número de proyectos, entre ellos, la mayoría de los que iban a desarrollar los últimos 500 MW repartidos por la Junta de Andalucía. Ahora se plantea otro concurso de 800 MW, todavía por salir, aunque los promotores acumulan muchos más megavatios de posibles parques en sus cajones.

Su desarrollo depende de múltiples factores, pero desde el sector se resalta como necesidad perentoria la clarificación del marco normativo y retributivo en el que se va a mover no sólo la eólica, sino también el resto de las renovables. Según explica el secretario general de Aprean, Carlos rojo, "ya hemos trasladado a la Junta la necesidad de revisar la planificación", que en la actualidad llega hasta 2013, para captar la inversión. "Cuanto antes determine una comunidad autónoma sus objetivos, antes las empresas apostarán por esas comunidades", apunta Rojo. En juego hay una inversión de 1,25 millones de euros por megavatio y, como recuerda Rojo, toda una industria de fabricación de componentes de las instalaciones de energías renovables.

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