El sesgo de género también afecta al callejero onubense. Tan solo el 12,27% de las calles de la provincia de Huelva tienen nombre de mujer. Un porcentaje que está por debajo de la media nacional, situada en un 12,7%, y que es el más bajo de entre todas las provincias andaluzas.

Se trata de un estudio realizado por los investigadores Dolores Gutiérrez Mora y Daniel Oto Peralías, de la Universidad Pablo Olavide, que han analizado el nombre de 15 millones de calles para medir la desigualdad de género en los topónimos urbanos desde el 2001 al presente. El análisis indica un lento avance hacia la igualdad con un leve aumento en el porcentaje de calles de mujeres de tres puntos porcentuales. 

La provincia con el porcentaje más alto de calles dedicadas a figuras femeninas es otra andaluza, Granada, con un 17,9%, mientras que la que más las olvida es Soria, donde tan solo un 8,6% de las calles tienen nombre de mujer. En Andalucía, además de Granada, son Sevilla y Málaga las provincias que se ponen a cabeza en este estudio, con un 16,93% y un 16,16% respectivamente. 

Este estudio deja fuera del análisis los nombres religiosos, relacionados con Dios, Jesucristo, la Virgen María o los santos, para que así los resultados no se distorsionen por "figuras que no reflejan los roles de género modernos e igualitarios de la mujer". Los investigadores indican que si las acepciones religiosas se incluyeran dentro de los cálculos, el porcentaje nacional de calles con nombre de mujer se incrementaría desde el 12,7 hasta el 17%. 

Sin embargo, se mantiene una tendencia a nombrar calles que sigue primando a los hombres frente a las mujeres, en una proporción de dos a uno. Por otra parte, las calles de mujeres tienen una posición más periférica dentro de la trama urbana de las ciudades siendo relativamente menos frecuentes en los centros urbanos. Así, el porcentaje de calles con nombre de mujer pasa del 9,4% en el centro al 14,6% en las zonas periféricas de los municipios; su menor presencia en los centros urbanos significa que su alcance para el conjunto de la población es menor.

El estudio también muestra que existe una clara relación entre los callejeros más feminizados y determinados indicadores socioeconómicos, de forma que las ciudades con mayor número de habitantes, poblaciones más jóvenes, mayor nivel educativo y un sector servicios más importante cuentan con más mujeres en su callejero. También se observa que existe correlación entre la proporción de calles de mujeres y determinadas variables relacionadas con la igualdad de género, como son una menor brecha de género en actividad laboral, educación y trabajo doméstico

La página web Ciudades con Género ofrece un "tour dinámico" donde se explica de manera no técnica el estudio, así como un gráfico interactivo para consultar la evolución de la proporción de calles de mujeres en cada municipio desde 2001 a 2022. Además, contiene un mapa donde visualizar el sesgo de género en la toponimia urbana (desde el nivel provincial hasta el detalle del callejero de cada municipio).