La Guardia Civil en Huelva refuerza su lucha contra la violencia de género con once equipos Viogén integrados por 27 efectivos, una dotación que se suma a la ya existente en las unidades para la mujer y el menor (Emume). La creación de estos equipos territoriales supone "un paso más" en el marco del Plan de Acción contra la violencia de género del Cuerpo desde noviembre de 2020.

De implantación en todo el país, en la provincia estarán desplegados en los municipios de Cortegana, Valverde del Camino, La Palma del Condado, Almonte, Moguer, Punta Umbría, Ayamonte, Isla Cristina, Lepe y Cartaya. Actualmente, los agentes realizan el seguimiento a hasta 800 casos activos dentro del Programa Viogén en Huelva.

La directora general de la Guardia Civil, María Gámez, ha presentado este lunes en la comandancia de Huelva este refuerzo a escala nacional que supone una novedad y que contará con 233 equipos Viogén en total formados por 641 efectivos, que se suman a los 635 especialistas de la Emume, lo que supone un total de 1.276 agentes para la lucha contra la violencia de género. En el caso de Andalucía las cifras se traducen en 62 equipos y 153 efectivos, números por los que, ha incidido, "ahora se duplica el número de atentes dedicados en exclusiva a luchar contra la violencia de género" dentro del Programa Viogén. 

Acompañada por del delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, la subdelegada del Gobierno en Huelva, Manuela Parralo, el jefe de Zona de Andalucía, general Alfonso Rodríguez Castilla, y el jefe de la Comandancia de Huelva, coronel Andrés López, Gámez ha apuntado la necesidad de "dar una respuesta más efectiva". Es, ha explicado, una medida más para combatir "una realidad dura y difícil" por la que diez mujeres han sido asesinadas en lo que va de año por sus parejas o exparejas, 1.136 desde que se tienen registros, en 2003. Además, la misma lacra ha dejado este año ya 10 huérfanos, 346 desde 2003 y aún más, desde ese mismo año 47 menores han sido asesinados en el marco de esa misma violencia.

Es por esta "obligación de perseguir y proteger" a las víctimas, una lucha que es "una prioridad para el Gobierno y el Ministerio del Interior", por lo que efectivos de seguridad ciudadana van a reforzar este servicio puesto que "las patrullas llevan a cabo esa primera atención".

En España hay actualmente más de 28.000 casos activos de los que hacen seguimientos los agentes, efectivos que reciben formación específica y continua "diseñada por cada comandancia", ha apuntado la directora general. En el caso de Huelva, Gámez ha señalado que existen "jornadas informativas semanales con el 50% de las patrullas de servicio ese día, de manera que a la semana siguiente la reciba el otro 50% y así todo el personal recibe la formación específica contra la violencia de género". María Gámez ha aludido también a la coordinación existente con las policías locales con convenios adscritos al programa Viogén. En Huelva hay quince localidades incorporadas al sistema.  

La directora general de la Guardia Civil ha enumerado entre los objetivos de este "paso más" la posibilidad de "ofrecer atención especializada a las víctimas desde el primer instante", la ventaja de que la víctima cuente con "una persona de referencia única", así como una "gestión institucional más robusta desde el primer escalón de respuesta" además de la ya citada coordinación con las policías locales.

María Gámez ha hecho un llamamiento a que las víctimas denuncien, "sólo así van a salir de esa espiral", que confíen en que es "una garantía para protegerlas". Ante los casos de mujeres que han sido asesinadas tras haber puesto previamente una denuncia contra quien finalmente les ha matado, la directora general admite que "nos siguen alertando las cifras", aunque ha defendido el actual sistema de protección, "admirado en otros países".

El incremento de las medidas de respuesta contra la violencia de género dará "un mejor servicio y las víctimas estarán más protegidas", es la "confianza" que ha trasladado María Gámez, que también ha alertado contra "los discursos negacionistas que deberíamos combatir", aquellos que tienen el fin de "falsear los datos de denuncias" y que "desprotegen más a las víctimas si hay quien no las va a creer".