La Sala del Consejo de Dirección del Rectorado de la Universidad de Huelva, sede central en la calle Cantero Cuadrado, fue escenario ayer del descubrimiento del tercer retrato creado para homenajear a los rectores de la Onubense desde su nacimiento. El protagonista fue Francisco José Martínez López, quien fuera rector de la Universidad de Huelva durante ocho años (2005-2013), y que ha descorrido la cortina para mostrar la obra, acompañado de la actual rectora de la UHU, María Antonia Peña, y del propio autor del retrato, Ramón León.

En el acto, Francisco José Martínez estuvo también arropado por una representación de la comunidad universitaria y el tejido social de Huelva, desde el actual equipo rectoral y de decanos, la secretaria del Consejo Social de la UHU, Teresa Herrera, hasta de otras entidades e instituciones como el presidente de la Asociación de Antiguos Alumnos 3 de Marzo, Antonio José Redondo, o la presidenta de la Autoridad Portuaria de Huelva, Pilar Miranda.

El retrato de Francisco José Martínez acompaña a partir a los de Francisco Ruiz Berraquero (1993-1997) y de Antonio Ramírez de Verger (1997-2005), en su condición de tercer rector de la UHU y, además, primer profesor onubense en asumir ese cargo desde su creación en 1993. Aún resta incorporar también el retrato de Francisco Ruiz, sucesor de Martínez, antes de que la actual rectora accediera al Rectorado.

Como señaló María Antonia Peña, con este acto “recuperamos una tradición inserta en el ADN de la vida universitaria y en nuestros valores, como es el reconocimiento y agradecimiento por su labor, dedicación y compromiso con la Universidad a los rectores que han pasado por la Onubense”, máxime teniendo en cuenta “la responsabilidad, sacrificio y esfuerzo que conlleva ejercer el cargo de rector”.

Peña, que recordó que Francisco José Martínez también recibió la Medalla de Oro de la institución, quiso subrayar la calidad tanto profesional como humana del ex rector retratado, así como su “voluntad, honestidad, y el legado tan importante que nos dejó tras su mandato”.

El propio Martínez afirmó que “es un honor” formar parte de esta tradición universitaria, plasmada en los grandes retratos del Rectorado, “con los que podemos contemplar a quienes han sido nuestros antecesores, a los que tanto admiro y con los que he tenido el honor de trabajar”.

Tanto Peña como Francisco José Martínez valoraron la “extraordinaria calidad” de la obra de Ramón León. La rectora quiso subrayar que “no solamente demuestra su talento técnico como pintor, sino también esa capacidad humana de captar el alma del retratado”.

Igualmente, Martínez, unido al autor por un vínculo tanto profesional como personal, ha destacado el “magnífico trabajo de Ramón León, profesor jubilado, fotógrafo y pintor de vocación, a quien le agradezco esta obra, un cuadro con vida, que además de representar a una persona, evoca una etapa de la que muchos de los presentes hemos sido protagonistas”. “El artista ha volcado su sabiduría y talento en este retrato, que viste de solemnidad esta sala del Rectorado”, ha expresado el antiguo rector.

Ramón León agradeció las palabras de ambos, y especialmente a Francisco José Martínez, por “la confianza que ha depositado en mí para un trabajo tan importante”, y detalló que con este retrato, efectivamente, ha pretendido “transmitir el alma de la persona, además de jugar con el punto de vista, esa expresión del protagonista, y la incidencia tan sutil que aporta la luz”. Todo ello, para lograr una composición que pueda definir a Martínez: “Una persona reflexiva, serena, y de total entrega y generosidad en todo lo que hace”.