Huelva

Fertiberia propone complementar y mejorar la restauración de la zona 4 de las balsas de fosfoyesos en Huelva

Balsas de fosfoyesos en Huelva.

Balsas de fosfoyesos en Huelva. / Josué Correa

Complementar y mejorar la restauración realizada en su día por el Ayuntamiento de Huelva, Egmasa y Fertiberia en la zona 4 de las balsas de fosfoyesos localizadas en la marisma de Huelva es lo que propone la compañía en el marco de su proyecto de restauración global. Así se recoge en el Estudio de Impacto Ambiental y Proyecto de Mejora de la Restauración de la Zona 4 Fertiberia (Huelva), presentado por la compañía ante la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco). Desde este lunes el estudio está sometido a información pública.

Este proyecto es necesario después de que la declaración de impacto ambiental del plan global, aprobada por dicha dirección general el 23 de septiembre de 2020, excluyera todas las actuaciones propuestas en él para la zona 4 debido a la falta de información técnica y de estudios específicos.

Además, establecía que Fertiberia debía diseñar un proyecto diferenciado, basado en el estudio de las características específicas de esta zona, y someterlo a la tramitación correspondiente.

Esta Zona 4, de unas 125 hectáreas de superficie, se encuentra delimitada por el Estero del Mendaña, el Estero de la Nicoba y la vía del ferrocarril, habiéndose encontrado inicialmente ocupada por las balsas de yeso de la instalación, aunque fue sometida a una restauración hace más de una década.

En su proyecto específico para esta zona 4, Fertiberia plantea inicialmente cuatro alternativas para la mejora de la restauración. Son las siguientes: No llevar a cabo ninguna actuación en el sistema; gestión externa de los residuos y yesos almacenados en la zona; gestión externa de los residuos almacenados en la zona 4 y tratamiento in situ de los yesos; y aplicación de mejoras en la restauración para el confinamiento de los residuos almacenados.

Se descartan, tras su estudio, las dos primeras por no ser viables técnicamente. Tras una evaluación del impacto ambiental en el entorno, se opta por la última que contempla la aplicación de técnicas que complementen la restauración ya realizada de la Zona 4, con el objeto de asegurar el confinamiento de todos los residuos almacenados, tanto los yesos, como el resto.

Esta actuación permitirá "minimizar el riesgo de transporte de sus contaminantes hacia las aguas superficiales y subterráneas circundantes y asegurar la estabilidad geomecánica del apilamiento". Al mismo tiempo mantendrá "un drenaje efectivo de sus aguas internas para favorecer la estabilidad y disminuir los gradientes hidráulicos que pudieran favorecer su fuga al entorno circundante".

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios