Felicidades en las bodas de oro

EL pasado día 16 del presente mes han llegado sus bodas de oro como casados el matrimonio formado por Rafael Sugrañes Hierro y Cristina de los Reyes Hernández, que después de cincuenta años, siguen siendo los más felices del mundo, tónica que ha sido una constante en este medio siglo, desde que en función religiosa se dieron el "sí quiero" en Huelva capital. Ahora este matrimonio vive en Ayamonte, donde crearon una empresa familiar de confitería, denominada 'La flor de la Canela'. Hoy domingo, sus hijos, nietos y demás familiares y amigos celebrarán el acontecimiento agasajando a esta pareja, que desde luego bien merecido que se lo tienen. Nada, que esperamos poder escribir dentro de veinticinco años más, la celebración de las bodas de platino, señal que tanto ustedes como yo estaremos vivos todavía, lo cual no estaría nada mal. Felicidades.

Quienes van a empezar a contar esta experiencia de casados, es la pareja formada por nuestros buenos amigos, Saray Acosta y Juanma Garrido, que ya han puesto fecha a su boda, aunque habrá que esperar un añito, pues según nos contaban ellos, será el próximo 19 de septiembre del 2009, cuando se den el "sí quiero", pero desde luego, han empezado ya a contar los días que le faltan para que llegue tan feliz fecha, de momento, a los dos lo hemos visto muy entusiasmados y tiempo van a tener más que de sobra para los preparativos. Nada amigos, que nos alegramos un montonazo y que os deseamos toda la felicidad del mundo y que lleguéis a las bodas de oro tan felices como Rafaely Cristina.

Hace unos días, Antonio García Correa, que fuera senador durante varias legislaturas y alcalde de Campofrío posteriormente, nos presentaba a un grupo de amigos suyos de Tharsis, que se encontraban pasando el fin de semana en el litoral. Domingo Delgado, Joaquín Gómez, Francisco Durán, Antonio García, Pablo Ellis y Lola Peña, (ella es de La Puebla), tomaban un aperitivo en una terraza de El Portil, mientras charlaban animadamente y se lo pasaban en grande, contándonos que cada vez que pueden, sobre todo como es lógico, en época estival, se desplazan a la playa para ponerse morenitos y cambiar de aires, que siempre es muy conveniente. La verdad es que lo vimos felices y contentos, que en definitiva es de lo que se trata, pues la penas, si es que las hubiera hay que olvidarlas en ocasiones.

Cambiando el tercio que dirían los toreros, el que está más mosca que un pavo oyendo una pandereta es Eduardo Lozano Saiz, al cual nos lo encontramos hace unos días, diciéndonos que estaba como loco, con los ruidos que ocasionan los balonazos que dan en una chapa que hay instalada en la zona deportiva del colegio Arias Montano de nuestra capital, la cual la han colocado para que los esféricos no se salgan del recinto y claro, para que personal no se salte dentro, y como él vive colindando con estas instalaciones, pues de ruidos está hasta el último pelo y claro, está hartito de pedir que estas chapas las sustituyan por redes, para que los balonazos no suenen y lo dejen descansar mientras que está en su domicilio, pero de momento nadie le hace caso.

A los arucitanos Clemente Duarte y a su encantadora hija Clara Duarte, después de mucho tiempo sin coincidir con ellos, nos lo encontramos hace unos días, contándonos el padre, que a sus 81 años de edad, todos los días hace unos 30 ó 40 kilómetros en bicicleta, y claro, se encuentra en una forma física algo increíble. Por su parte, Clara, que canta como los mismos ángeles, nos decía, que sus hijos la están animando constantemente a que se presente en uno de los concursos de coplas que se emiten en las televisiones, pero ella no está por la labor, aunque haría un magnífico papel, pues prefiere cantar solo entre amigos, si bien es cierto, que un poquillo de interés si tendría en cuanto le insistieran, pues eso de cantar con una gran orquesta le podría ilusionar. Animo Clara, que tú puedes y sabes.