La exministra onubense Fátima Báñez, aceptó ayer la propuesta del líder del PP, Pablo Casado, para presidir la Comisión de Exteriores del Congreso, cargo que ocupó hasta que dejó el escaño la ex secretaria general del partido María Dolores de Cospedal.

El presidente del PP hizo el anuncio en su intervención ante el grupo popular del Congreso, en la que ha dado la bienvenida a Francisco Bañó, que ocupa el escaño que dejó vacante Cospedal, a quien Casado definió como “una gran ministra y una gran secretaria general”.

Pablo Casado aseguró que el compromiso del PP ha sido siempre el de dar a los exministros que han servido a España y que siguen haciéndolo como diputados el “rango institucional que se les puede dar”, y es el de presidentes de Comisión. También recordó que Fátima Báñez era la única exministra que no había sido elegida presidenta de Comisión, y con esta vacante se le da este puesto. Casado recalcó la importancia de la Presidencia de la Comisión de Exteriores, como cargo institucional y como vía de interlocución con las embajadas, “más en los tiempos” actuales y ha celebrado por eso que ocupe el cargo una persona “de la talla” de Báñez.

La exministra fue la mano derecha de Soraya Sáenz de Santamaría en las primarias del partido –la vicepresidenta la propuso como su secretaria general y tras la elección de Casado no aceptó ocupar la Presidencia de una Comisión como se le proponía desde el partido. Finalmente, Fátima Báñez, que pasó la jornada del lunes entera en su provincia, Huelva, acompañando a Pablo Casado en la campaña electoral andaluza, aceptó este puesto que le ofreció el líder del PP.