Ence recibe en sus instalaciones de Huelva al primer grupo formado con becas de la compañía

Las quince personas formadas en operaciones forestales mecanizadas, así como las instituciones onubenses implicadas en las becas forestales de Ence, han sido recibidas por la compañía en sus instalaciones onubenses. El objetivo ha sido evaluar la experiencia y marcar los siguientes pasos en el futuro profesional de este primer grupo beneficiario de la iniciativa. Catorce hombres y una mujer se han certificado en el curso de Maquinista forestal de la Escuela Forma-T de Lugo, en Galicia, donde han desarrollado durante el pasado mes de octubre una formación de 120 horas teóricas y prácticas en la que la compañía ha invertido más de 33.000 euros.

Cada participante ha adquirido conocimientos en el control y manejo la maquinaria forestal de la mano

de personal altamente cualificado, y ha obtenido también los conocimientos básicos de mecánica para su

correcto mantenimiento. Esta capacitación les ofrece una mejora inmediata de sus perspectivas

laborales, ya que existe una grave carencia de personal cualificado en la provincia onubense para este

tipo de operaciones forestales. Esa es una de las razones de Ence para impulsar estas becas: favorecer la

profesionalización y tecnificación de un sector económico fundamental para la provincia, a la vez que

refrenda su compromiso con las personas y con el territorio en el que desarrolla sus actividades.

Compartiendo la importancia de este objetivo, han colaborado estrechamente en el impulso de las

primeras becas forestales de Huelva la Mancomunidad Beturia del Andévalo, la Mancomunidad Sierra

Minera y los ayuntamientos de Rosal de la Frontera y Aroche, desde donde han coordinado la selección y han apoyado de diferentes formas la manutención y estancia en Lugo durante tres semanas de las personas becadas.

Durante en el encuentro en las instalaciones de Ence, además de evaluar la experiencia y recoger sus

opiniones de cara a la convocatoria de próximas becas forestales, el grupo ha conocido las labores de

transformación de la biomasa en energía eléctrica renovable, así como las operaciones de los viveros de

la compañía en Huelva.

En las próximas semanas, los siete mejores expedientes de este primer grupo formado accederán a dos meses de prácticas en empresas proveedoras de Ence, no obstante, todas las personas están ya preparadas para dar respuesta a la necesidad de profesionales cualificados en el manejo de maquinaria forestal que está demandando el sector.

Para Ence, la dinamización de la economía y el empleo en el entorno rural "es una clave fundamental para

evitar el problema social que supone el despoblamiento de los pueblos". Por eso, la compañía mantiene

desde hace años una estrecha relación con sus públicos de interés en las localidades en las que desarrolla

sus operaciones forestales, "dando respuesta a sus necesidades y buscando consolidarse como un motor

dinamizador de las áreas rurales, las más necesitadas de este tipo de apoyos".