Ence destina 74 millones de euros para la nueva planta de biomasa
La empresa remite a la Comisión Nacional del Mercado de Valores una actualización de su Plan Estratégico hasta el año 2020
Una comunicación de Ence a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, confirmó que los planes de la empresa de celulosa no pasan por su actual ubicación en la provincia de Pontevedra y sí por la puesta en marcha de una nueva en la provincia de Huelva . Así al menos lo señala en la actualización de su plan estratégico para el trienio 2017-2020 y del que desapareció el presupuesto para la construcción de las instalaciones en la localidad gallega de Lourizán, anunciada el pasado junio, mientras que en su lugar, el resumen inicial del documento recoge en un apartado que "la nueva planta de biomasa se desarrollará en Huelva, dentro del negocio de energía", junto al cual figura la cifra que invertirá en el desarrollo de la misma y que asciende a 74 millones de euros.
Ence matizó ayer que la modificación de su plan estratégico supone únicamente "una adaptación a las circunstancias actuales de la compañía". La empresa no cuenta con poder obtener los permisos necesarios para construir la planta de biomasa en Pontevedra hasta dentro de, al menos, dos años, lo que aleja el horizonte más allá del período contemplado en el plan estratégico. Sí se ajusta a este espacio de tiempo el proceso que tendría que completar para obtener la autorización en Huelva.
Así, "la compañía pondrá en marcha en Huelva la planta de 40 MW adjudicada en el concurso de generación del Ministerio de 2016", según explicó Ence, que añade que los "permisos llegarán antes y podremos construirla dentro de los plazos exigidos por dicho concurso".
El pasado 17 de junio, Huelva Información recogía las intenciones de la empresa de construir una nueva planta de generación de energía con biomasa, dentro de un plan global que se ha confirmado ahora y que apuntaba ya a "buscar un emplazamiento fundamental para el desarrollo de su estrategia de negocio en este ámbito".
Ence dejo de fabricar pasta de celulosa en 2014, después de un proceso traumático que concluyó con la pérdida de 300 puestos de trabajo después de semanas de protestas. La nueva planta se añadirá a la actual de 90 MW y supondrá una apuesta por la implantación de la tecnología más avanzada en materia medioambiental, así como a la generación de puestos de trabajo que, ya en su momento, se fijaron en el entorno de los 30, a añadir a los 80 que disponen en la actualidad. El consumo de biomasa se elevará hasta las 400.000 toneladas anuales, lo que contribuirá a la reducción de la emisión de CO2.
La planta de Huelva es la parte más importante del Plan Estratégico de la empresa que contempla unas inversiones hasta el año 2020 de 325 millones de euros y una producción de energía renovable con biomasa en el entorno de los 380 MW.
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