"Diagnosticamos cirrosis a gente de 40 años"

Uno de los fenómenos que más preocupan a los especialistas de Patología Digestiva es el que está relacionado con el consumo de alcohol en la población en general y entre los jóvenes en particular. Uno de los efectos más evidentes es el diagnóstico cada vez más prematuro de las cirrosis hepáticas. Desde la sección de Aparato Digestivo del hospital Juan Ramón Jiménez se señala que hay un alarmante descenso en la edad en el diagnóstico de esta enfermedad, encontrándose diagnósticos que ya se están realizando a personas de 40 años de edad.

El consumo y abuso de alcohol trasciende a momentos puntuales en los que los jóvenes puedan ser atendidos por comas etílicos durante los fines de semana. Las ingestas continuas tienen otras repercusiones en el hígado como la gastritis o la dolorosísima pancreatitis crónica. Tanto ésta como la cirrosis ya se dan en los casos de alcoholismo crónico. De este modo, también desde el mundo de la medicina se encienden las luces rojas ante un fenómeno social que se ha convertido en todo un problema sanitario.

En otro orden de cosas, uno de los momentos más importantes de la 39ª Reunión de la Sociedad Andaluza de Patología Digestiva fue la presencia ayer, del doctor Binmoeller procedente de los Estados Unidos y que habló sobre Perspectivas futuras de la endoscopia diagnóstica y terapéutica. Cabe recordar que una endoscopia es una técnica diagnóstica que consiste en la introducción de un endoscopio a través de un orificio natural o una incisión quirúrgica para la visualización de un órgano hueco o cavidad corporal. El desarrollo actual indica la no utilización de las incisiones para estudiar la cavidad abdominal, usando los orificios naturales. Se encuentra aún en fase experimental, lo que no pasa con las cápsulas que el paciente ingiere que están dotadas de algún modo de cámara que permite la observación de lo que ocurre en el aparato digestivo. Esta técnica ya se utiliza con muy buenos resultados.