“El mundo está medio loco”. Son palabras de una vecina onubense escuchadas en la acera de enfrente al Andrés Estrada en la tarde de ayer. Más adelante, a la vera de los bloques de viviendas de la Avenida Pío XII de la capital decenas de vecinos rodeaban un cordón policial en torno a unos contenedores. Coches de policía y numerosos agentes se asentaban en el lugar mientras algunos efectivos interrogaban a varias personas a ojos de varios corrillos de vecinos. “Han encontrado la cabeza de un hombre”, era la frase que bombeaba cada susurro de la zona. El macabro hallazgo era cierto y ocurrió pasadas las 15:00. El caso llegó hasta más de las 21:00 con la detención del presunto autor de los hechos. El boca a boca corrió como la pólvora. Y todo, en una tarde de Halloween en la que la trágica realidad apagó de un plumazo cualquier tétrico disfraz de ficción que vestía la piel de los niños.

Los hechos ocurrieron cuando, según fuentes policiales apuntaron a Huelva Información, un varón, alias el Mejicano –alias el Español en México– iba con una bolsa, la cual iba enseñando a la gente, que se horrorizó cuando vio lo que había en el interior. Este varón tiró la bolsa en el suelo y salió corriendo.

El caso derivó en una investigación a fondo por parte de los efectivos policiales. Los restos encontrados sobre la zona se retiraron en una camilla bajo un saco que lo cubría todo.

A media tarde, según fuentes de este periódico, los encargados del suceso creían saber dos cuestiones: la identidad de la víctima (un varón de mediana edad, que finalmente se confirmó) y del autor de los hechos, que no tenía por qué ser el varón que portaba la bolsa y escapó del lugar. A algo más de las 20:00 los efectivos policiales estaban a escasos minutos –a la espera de la autorización judicial– de entrar en el edificio de la víctima para ver si allí se encontraba la parte del cuerpo que faltaba.

No fue hasta pasadas las 21:00 cuando la Unidad de Prevención y Reacción de la Policía Nacional detuvo al presunto autor de los hechos, el varón que portaba la bolsa con la cabeza de la víctima. No puso resistencia. La detención tuvo lugar en el domicilio de la propia víctima, en la calle Teniente Navío José Estrada y Cepeda número 3, donde también se encontró el cuerpo de la víctima. 

Aunque los efectivos policiales se fueron del lugar de los hechos cerca de las 17:00, decenas de vecinos continuaban sorprendidos por lo sucedido. De la acera a los balcones, o en corrillos, la conversación llevaba el mismo denominador común. “El chaval no era muy mayor, ha llegado al contenedor y había dos o tres chavales, y les ha dicho: ‘toma queréis una cabeza humana”, señalaban algunas fuentes vecinales. Otras aseguraron que hubo quien salió a correr detrás del varón aunque sin llegar a cogerlo.