En los campanarios de las iglesias de la ciudad ya vuelven a tocar las campanas a misa. Si hasta ahora ha servido a muchos vecinos para salir a las ocho de la tarde a sus balcones a aplaudir a los sanitarios y a tantos que se esfuerzan en este tiempo de pandemia para hacer frente al coronavirus, las iglesias vuelven a tener su ritmo habitual convocando a los fieles a sus cultos,en la nueva fase del confinamiento.

De acuerdo con ella y al no poder celebrarse concentraciones públicas, el Obispado de Huelva, siguiendo las orientaciones de la Conferencia Episcopal Española se adaptará a ella en la festividad del Corpus Christi, del próximo 11 de junio, que se celebrará en el interior del templo, quedando la posibilidad de la bendición desde la puerta, pero se descarta la procesión.

Los devotos se acercan a visitar a la Virgen de la Cinta en su santuario.

La apertura de los templos al culto se está desarrollando con toda normalidad, dentro de las limitaciones marcadas por el estado de alarma de restringir el aforo un 30%, además del mantenimiento de medidas de higiene de uso de mascarillas y de distanciamiento social, con la posterior desinfección del espacio.

La reducción de aforo ha llevado a algunas parroquias a incrementar el número de misas diarias para poder atender a los fieles e, incluso, en el caso del centro de la ciudad, a coordinar los horarios las tres parroquias de San Pedro, la Concepción y la Merced.

El párroco de la Concepción, Diego Capado Quintana, destaca que “dentro de las limitaciones marcadas que se están respetando muy bien, hay bastante ánimo en la gente de participar en los cultos, con bastante asistencia en estos dos primeros días”. Al mismo tiempo, Diego Capado destaca la aportación que están haciendo los feligreses para la atención a los más necesitados, “esta es una situación provocada por el coronavirus está moviendo muchas conciencias y la participación de la gente está resultando muy generosa”. Una ayuda que está ahí por parte de la labor social de la Iglesia a través decáritas parroquiales. Solo en estos dos días se han llegado a recaudar dos mil euros en esta iglesia para obra caritativa.

En el caso de la parroquia de la Concepción hay que destacar la presencia de la imagen de Jesús Nazareno en el altar mayor, al que fue trasladado para su quinario en la misma semana que se procedió al cierre de los templos por el confinamiento. Así que ha resultado también un hecho destacado para los feligreses de la Concepción verlo ahora compartiendo su altar de cultos con la imagen de la Virgen de Fátima, a la que se le está dedicando un triduo que culmina hoy, a las 20:00, con ocasión de su festividad litúrgica. El ejercicio de las cinco llagas de los viernes del Nazareno se celebrará en el altar mayor y al día siguiente estará la imagen en su capilla.

Uno de los lugares más visitados estos días ha sido el santuario de la Patrona de Huelva, Nuestra Señora de la Cinta, ante cuya imagen se celebró la pasada semana un triduo de rogativas por el final de la pandemia a puerta cerrada y presidido por el obispo de Huelva, José Vilaplana. Estos días solo es de visita en horario reducido y la misa semanal del domingo a las 11:00.

Visitas que también se están sucediendo en los diferentes templos de la ciudad, en muchos de ellos

recibiendo a los cofrades que no pudieron tener las procesiones de Semana Santa.

Lo que sí recuerda a la pasada Cuaresma es aún la presencia de Nuestro Padre Jesús de las Penas en sus Tres Caídas en la iglesia de Santa María de la Esperanza, ya que en la víspera de su traslado fue suspendida la procesión extraordinaria a su parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, tras la celebración del vía crucis de las hermandades con ocasión de su 75 aniversario fundacional y la imposición de la medalla de la ciudad de Huelva.

Ahora no podrá volver la imagen como estaba previsto, así lo ha dicho a Huelva Información el hermano mayor, Fabián Tello. Así espera que en los próximos días se pueda proceder al traslado del paso en un camión, mientras que la imagen del Señor de las Tres Caídas quedará al culto en la capilla de Santa María de la Esperanza “esperando a ver si se produce un momento en el que se pueda hacer su traslado en posteriores fases de la desescalada”, dice Fabián Tello.