Un total de 28.078 niños de entre 5 y 11 años se incorporarán a la campaña de vacunación contra la Covid-19 a partir de mediados de mes. Así lo aprobó la Comisión de Salud Pública esta semana, si bien, tal y como expresó la ministra de Sanidad, Carolina Darias, queda a criterio de las propias comunidades autónomas cómo inocular las dosis en los menores de 11 años.

Las autoridades en Andalucía ya expresaron su intención de vacunar a los niños de entre 5 y 11 años “de forma preferente” en los centros de salud en horario de mañana y tarde, sábados incluidos, para facilitar que puedan acudir acompañados de sus padres, que deberán aportar una autorización si no acuden con ellos.

Las dosis se van a repartir a las comunidades autónomas “de manera proporcional a la población infantil” que tenga cada una de ellas según señalaron desde el Ministerio de Sanidad. El cálculo del Gobierno andaluz es que lleguen unas 260.000 dosis de Pfizer para vacunación infantil y se ha garantizado que empezarán a administrarse “en cuanto lleguen”.

El 20% de la población andaluza de 5 a 11 años ya tiene inmunidad adquirida frente al covid por haber pasado la infección, pero la vacunación se llevará a cabo en grupo a toda la franja de edad y las autoridades sanitarias subrayaron que, aunque cursan la enfermedad de forma “leve”, los menores son “posibles contagiadores de grupos de mayores” y un colectivo “donde pueden mutar los virus”.

Esta vacuna se dispensará en viales diferentes a los utilizados para la población adulta. Asimismo, el intervalo de administración de la segunda dosis sea a ocho semanas para contribuir a incrementar la respuesta inmune, así como para tener vacunados a todos los menores entre 5 y 11 años en un corto espacio de tiempo con al menos una dosis.

La dosis empleada en niños es tan solo “un tercio de la dosis empleada en la población adulta”, lo cual también reduce los posibles efectos secundarios. Uno de los argumentos más de peso para aprobar esta medida es que en este colectivo también hay complicaciones derivadas de la infección por SARS-CoV-2.

También existen argumentos para ir en contra de esta vacunación infantil, ya que, como reconoce la Asociación Española de Pediatría “la pandemia de la covid en nuestro país se encuentra en niveles de incidencia bajos y la enfermedad que causa el SARS-CoV-2 en población infantil es, en general, leve”.

Del mismo modo, existe un “temor a la aparición de nuevos efectos secundarios graves no detectados en los ensayos clínicos en estos grupos de edad, como ocurrió con la miocarditis en adolescentes y adultos jóvenes.

El Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA), que refleja los contagios por grupos de edad, establece que uno de cada cuatro onubenses de entre 0 y 14 años se ha contagiado en algún momento. A su vez, se contabiliza 101 infectados en este grupo de población en los últimos siete días, de los que 54 son niños y 47 niñas.