Tribunales

Nueve años de cárcel por asestar cinco puñaladas a un hombre que discutía con un amigo suyo en Huelva

Descampado en la calle Pérez Galdós de Huelva capital.

Descampado en la calle Pérez Galdós de Huelva capital. / G. M.

La Audiencia Provincial de Huelva ha condenado a un hombre a nueve años de cárcel por asestar cinco puñaladas con una navaja a un hombre que se estaba peleando con un amigo suyo, y amenazar de muerte a la pareja de la víctima con el arma.

La sentencia lo considera autor de un delito de homicidio en grado de tentativa y un delito de lesiones, por los que le impone esa pena de prisión, además de prohibición de aproximarse a la víctima y a su pareja a menos de 100 metros y de comunicarse con ellos por un período de 10 años, en el caso de la primera y de 5 en el segundo. Asimismo, deberá de cumplir una medida de libertad vigilada, que se ejecutara con posterioridad a la pena privativa de libertad, por un periodo de nueve años.

También se condena a una segunda persona, que inició la pelea y participó en la agresión, a un año de cárcel por un delito de lesiones y un delito leve de lesiones, y además se le impone una orden de alejamiento de la mujer y una multa de 369 euros.

Ambos condenados indemnizarán de manera conjunta y solidaria al apuñalado en la cantidad de 330 euros por los bienes y el efectivo perdidos y a la mujer en 6.409 euros por las lesiones y 2.414 euros por las secuelas; el de mayor pena, tendrá que pagar también al agredido en la cantidad de 6.686 euros por las lesiones y 25.000 euros por las secuelas.

Se declara probado en la sentencia, que ha sido ratificada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) al desestimar los recursos de los condenados, que los dos acusados la madrugada del 10 de mayo de 2021, se encontraban junto a otros amigos en el interior de dos vehículos en un descampado de Huelva, donde también se encontraban un hombre y su pareja.

En un momento dado, estos dos últimos fueron a pedir papel para un cigarro al grupo donde se encontraban los procesados y estos le pidieron un mechero. Tras pedirle en reiteradas ocasiones el hombre a uno de los procesados que le devolviese el mechero, este lo tiró al suelo, salió del coche y comenzó a golpearlo.

Durante la agresión, apareció el segundo procesado, que se encontraba en el vehículo contiguo, y sacando una navaja apuñaló con ella en el costado al hombre, haciéndolo caer al suelo, donde ambos siguieron golpeándolo con puñetazos y patadas, y donde recibió hasta cuatro puñaladas más en la espalda por el que la portaba el arma al tiempo que los amenazaba de muerte.

En el transcurso de dicha agresión, al querer la mujer tratar de defender a su pareja, recibió golpes en la cara por parte de uno de los acusados y forcejeó con el que portaba la navaja, instrumento con el que llegó a amenazarla de muerte.

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