El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado la sentencia de la Audiencia Provincial de Huelva por la que se condenaba a Óscar V.I. a tres años y cinco meses de prisión por dar una paliza y agredir con un hacha a un trabajador suyo en la capital onubense.

Tal y como consta en la resolución, remitida por el TSJA a Huelva Información, el tribunal andaluz da también por probado que este individuo (con antecedentes penales por quebrantamiento de condena, amenazas y violencia en el ámbito familiar, entre otros) citó en la tarde del 13 de septiembre de 2018 a la víctima en su domicilio de Huelva.

El hombre, “creyendo que le citaba para abonarle el dinero que le debía por haber trabajado para él como camarero y montador de carpas durante las fiestas de la  Virgen de la Cinta entre los días 2 y 9 de septiembre”, accedió a la invitación.

Pero cuando llegó a la casa, en torno a la 20:47, “fue atacado de forma violenta por el acusado y por otros tres hombres encapuchados, de forma que no se les veía el rostro, golpeándole repetidamente por todo el cuerpo, haciéndole caer al suelo, atándole de pies y manos con bridas y amordazándole con cinta americana negra para que no pudiera gritar ni pedir auxilio”.

Seguidamente, el condenado lo golpeó repetidamente “con la parte roma de un hacha en diferentes partes del cuerpo y, a continuación, con la parte cortante en el pie derecho, seccionándole el talón de Aquiles”. La agresión finalizó cuando un vecino “golpeó la puerta, preguntando qué estaba ocurriendo”.

A continuación, “el acusado y resto de agresores cortaron las bridas que habían amarrado en los pies” de la víctima y se dieron  a la fuga.

El perjudicado fue localizado por funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía en la calle sobre las 21:15. Sangraba abundantemente, seguía maniatado y presentaba cortes en las piernas y el talón. Posteriormente fue traslado al hospital Juan Ramón Jiménez.

En la casa del acusado se encontraron el hacha, un cuchillo debajo de un sofá, seis bridas negras, una cuerda verde y su pasamontañas.

El damnificado tuvo que ser operado del talón, precisando rehabilitación. También tenía “fractura no desplazada del cartílago tiroides”. Estuvo hospitalizado una semana. Además, padece estrés postraumático.

La Audiencia absolvió a Óscar V.I. del delito de detención ilegal del que venía acusado, pero lo condenó por la autoría de un delito de lesiones a la pena de tres años y cinco meses de prisión. Tendrá que indemnizar a la víctima en el importe que se precise tras el informe definitivo de sanidad.

La acusación había apelado al TSJA para que este condenara al  encausado por el delito de detención ilegal y para que elevara la condena de lesiones a cinco años de prisión.

La defensa, por su parte, pretendía que se declarara la nulidad de los registros domiciliarios practicados a su representado y señalaba que se produjo una vulneración de la presunción de inocencia, al reiterar el procesado que “no se hallaba en su domicilio cuanto los hechos suceden”. Por todo, interesaba la absolución de su cliente.

Finalmente, el TSJA ha optado por confirmar la sentencia de la Audiencia de Huelva, tal y como reclamaba la Fiscalía