Clara Campoamor se estrena en Huelva

Puesta de largo de la asociación Clara Campoamor en Huelva. Con el refrendo de su presidenta nacional, Blanca Estrella Ruiz, y de onubenses que perdieron a sus niños a manos de despiadados asesinos, como Marianela Olmedo (María Domínguez y su padre, Miguel Ángel), Ruth Ortiz (Ruth y José) y Juan José Cortés (Mari Luz), se presentó ayer en sociedad la nueva delegada en Andalucía del colectivo protector de la mujer y la infancia, la letrada Patricia Catalina López.

La prestigiosa togada madrileña está muy vinculada a Huelva, provincia en la que lleva medio centenar de procedimientos, lo que la animó recientemente (junto a sus socios del despacho Castellana 266 Abogados) a abrir una filial en la capital onubense, concretamente en el 33 de la calle Rascón. Ahora el bufete privado ha abierto las puertas a la asociación Clara Campoamor para que su oficina sea también la sede del colectivo para toda Andalucía.

Catalina confesó ayer que "es todo un honor pertenecer a Clara Campoamor, todo un regalo para una penalista que sea capaz de llevar este tipo de temas; son casos muy delicados y muy difíciles, sobre todo porque tienen un componente de sentimiento muy duro". Pero afronta el reto con ilusión y valentía en un trabajo prácticamente altruista que tiene como objetivo "luchar por los hijos de todos".

Cortés, Ortiz y Olmedo aplaudieron que la delegación andaluza de la entidad esté en Huelva. La madre de Ruth y José remarcó que "toda ayuda es poca cuando hay un niño asesinado y ojalá hubieran estado antes". Para el padre de Mari Luz "a todos los onubenses nos debería llenar de orgullo que la asociación se afinque aquí".

Blanca Estrella Ruiz les agradeció su presencia en el acto inaugural, "porque siempre están donde se les necesita y siguen peleando, no por los suyos, sino por el resto, para que a otro niño no le pase". Alabó la profesionalidad de Patricia Catalina, a la que le ha encomendado combatir contra "todo delito contra la infancia que se cometa en Andalucía", sobre todo contra menores víctimas de pederastas, de violadores y de asesinos, y "dar apoyo a sus familias".

El foco de la delegación andaluza de Clara Campoamor está ahora en tres casos: el parricidio de El Ejido, el asesinato del pequeño Gabriel Cruz y el doble crimen de Almonte.

Sobre el asunto onubense Ruiz indicó que es ahora "nuestra pelea". Respecto al resultado absolutorio del mismo, la cabeza visible de Clara Campoamor indicó que "mal el jurado, pero la presidenta del tribunal que aceptó ese veredicto que no tenía ni pies ni cabeza jurídica, que se busque otro trabajo porque aceptó todo aquello; simplemente el testimonio de una exnovia sirve para una libertad; ¿Para qué trabajó la Guardia Civil? ¿Para qué trabajaron los forenses? ¿Para qué se esforzaron los testigos?". A su entender, en el Código Penal "se debería introducir la responsabilidad civil de aquellos jueces o fiscales que se equivocan".

El asesinato de Miguel Ángel Domínguez y su hija María, de ocho años, está pendiente de la posible adhesión de la Fiscalía General del Estado al recurso de casación de las víctimas. "Creo que va bien, de momento ya ha pedido el sumario y los vídeos del juicio", refirió Blanca Estrella, que espera que finalmente el Tribunal Supremo revoque la sentencia y ordene la repetición del plenario del doble crimen de Almonte.

Patricia Catalina, por su parte, anunció oficialmente que si el Supremo da la razón a las víctimas, "Clara Campoamor estará como acusación popular, sobre todo por lo muchísimo que quiero a esta familia, yo soy corazón verde y ahí estaremos".

En caso contrario, si el Alto Tribunal mantiene la absolución del encausado, Francisco Javier Medina, por el asesinato a cuchilladas de padre e hija en su propia casa el 27 de abril de 2013, "recurriremos al Constitucional y al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo", sentenció Blanca Estrella Ruiz. "Lo que le pedimos al Supremo es, además de justicia, profesionalidad y humanidad".

La delegada andaluza agregó que "si la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil dice que es este señor, intentaremos ir a por este señor y que se siente de nuevo en el banquillo, porque estimamos que se ha vulnerado la tutela judicial efectiva y que ha sido un juicio demasiado técnico y el jurado no ha estado a la altura".

Marianela Olmedo agradeció las buenas intenciones de la asociación: "Para mí es una esperanza muy grande que me llena de satisfacción; siempre están pendientes de la defensa de las víctimas". La madre y esposa de los almonteños asesinados manifestó que "no estoy pasando por buenos momentos, el hecho de que el asesino de mi hija esté en libertad para mí ha sido una cosa terrible".

La delegación en Andalucía de Clara Campoamor se comprometió además con Ruth Ortiz a hacer un seguimiento a su exmarido y asesino de sus pequeños, José Bretón, "para que no tenga beneficios penitenciarios y cumpla íntegramente la pena".

Sobre la polémica personación de la asociación en el caso del niño almeriense Gabriel, Catalina aclaró que trató que contactar con los padres del menor "pero fue imposible porque tenían el teléfono completamente blindado". Explicó que el viernes 4 de mayo "el juez nos notificó que estábamos personados como acusación popular y entonces nos íbamos a poner a disposición de la familia, pero el lunes dio una rueda de prensa diciendo que no nos quiere; lamentándolo mucho, seguiremos en el caso si el juez nos lo permite". Ruiz apostilló que "mientras haya un niño que han asesinado, Clara Campoamor va a estar ahí".

Finalmente, la presidenta nacional de la entidad pidió el apoyo de los onubenses "a todas estas familias andaluzas y a la prisión permanente revisable". Subrayó que en muchos de estos delincuentes que arremeten contra los niños, especialmente en los pederastas, el riesgo de reincidencia es elevadísimo. Es lo que ocurrió con el asesino de la pequeña onubense Ana María Jerez Cano, que volvió a violar pocos días después de salir de prisión y que se encuentra otra vez entre rejas.