El Ayuntamiento desarrolla desde hace un mes una campaña preventiva de desinsectación destinada al control de plagas en toda la ciudad, una operación planificada que continuará hasta finales de agosto con el fin de abarcar la red de alcantarillado, pozos, acometidas e imbornales situados en todos los barrios. La campaña está dirigida a la erradicación de cucarachas y, como cada año, se lleva a cabo con la llegada del calor, debido a que la subida de las temperaturas provoca la salida al exterior de un mayor número de ‘periplanetas americanas’ y es necesario una intervención más exhaustiva a través de la red de saneamiento urbano.

A juicio de la concejal de Hábitat Urbano, Esther Cumbrera, a la intensificación de las tareas de limpieza y desinfección que se realiza durante la crisis del coronavirus suma campañas planificadas como ésta, cuyo objetivo es “que no quede ni un solo punto de la ciudad sin desinsectar, interviniendo de la manera más efectiva posible para atender también las incidencias detectadas por el propio Ayuntamiento y los avisos de infestación”.

Durante las últimas semanas se han tratado una media diaria de 200 focos en distintas zonas y barrios de la capital, como Marismas del Odiel, Huerto Paco, Polígono San Sebastián, Pío XII, la Avenida de Andalucía, la Avenida de Adoratrices, La Orden alta y baja, Santa Marta, Cardeñas, el entorno de la Universidad de Huelva, así como la Plaza de la Merced, Pablo Rada y sus calles adyacentes; y se continuará por toda la ciudad, para abarcar la totalidad de las redes de saneamiento.

La concejal resalta que a la realización de estas tareas están dedicados dos equipos integrados por cuatro operarios, que disponen para estos trabajos de vehículos ecológicos GLP Autogas, así como de dos carros eléctricos con ruedas. Medidas de respeto medioambiental con las que también se les facilita a los trabajadores que puedan realizar más cómodamente los desplazamientos con los 20 litros de producto destinados a la pulverización.

El Consistorio informa de que estas intervenciones tienen unos “efectos residuales” durante las horas posteriores a su actuación, consistentes en la posible salida de las arquetas y alcantarillas tratadas de algunas cucarachas moribundas, por lo que solicita la comprensión ciudadana.