Atravesadas por la Ruta del Camaleón

Una franja de arenal de casi tres kilómetros, que se divide en cuatro playas, cada una con sus equipamientos

Atravesadas por la Ruta del Camaleón
Atravesadas por la Ruta del Camaleón / Reportaje Gráfico: Jordi Landero

09 de agosto 2017 - 02:02

Las playas más extensas de Isla Cristina se encuentran, sin duda, hacia el este del núcleo urbano. Un espacio natural y prácticamente virgen dada la total ausencia de construcciones, flanqueado al norte por el paraje protegido conocido como parque litoral o cordón dunar de Isla Cristina, donde la única dificultad para contemplar al esquivo camaleón que habita este espacio es la capacidad que tiene dicho reptil para mimetizarse con el entorno.

Un espacio donde se encuentra la denominada Ruta del Camaleón, que este año ha logrado el distintivo Sendero Azul en reconocimiento a la calidad medioambiental de este hábitat, idóneo para un reptil que es ya todo un símbolo para buena parte del litoral isleño.

Se trata de una franja ininterrumpida de arenal de casi tres kilómetros longitudinales por noventa metros de anchura media, que se divide en cuatro playas, cada una con sus equipamientos y servicios, accesos y nombre concreto. De levante a poniente se prolongan por tanto, una detrás de otra, las playas del Camping (en realidad una extensión hacia el este de la Playa Central); del Hoyo, Casita Azul e Icona-Pesmar, ideales para largos y relajados paseos, disfrutar de la naturaleza que las rodea o darse un chapuzón en los calurosos días estivales en sus habitualmente tranquilas aguas.

La Playa del Camping, conocida de esta forma por albergar en sus inmediaciones uno de los campings de la zona, está bordeada en su parte norte por el parque litoral, una zona protegida donde habita una importante flora y fauna y que se extiende por el resto de playas de esta zona de Isla Cristina hasta la playa de Urbasur, que hace de transición con la urbanizada playa de Islantilla. Se accede a la misma directamente por la carretera o por la Ruta del camaleón, que se extiende a lo largo de dos kilómetros prácticamente por todo el cordón dunar.

La siguiente, la Playa del Hoyo, que cuenta con una agradable área recreativa de descanso bajo un frondoso bosque de coníferas y eucaliptos, es ideal para el esparcimiento familiar gracias a su infraestructura de mesas, bancos y zona de recreo infantil. El cordón dunar sirve de línea divisoria entre la playa y el pinar. A esta zona de baño se accede directamente desde la carretera y cuenta con una importante bolsa de aparcamientos. También es posible llegar a ella a pie por la Ruta del Camaleón. Tiene una longitud de 650 metros, 90 de anchura media y se caracteriza por sus aguas tranquilas, oleaje moderado y fina y blanca arena.

Más al este de la anterior se encuentra la Playa Casita Azul, llamada así por albergar en el pinar que la flanquea por el norte una curiosa construcción del color de su nombre, que fue en tiempos casa de guardeses y que actualmente alberga un centro de interpretación de la naturaleza, formas de vida y etnografía de Isla Cristina.

Habitualmente eligen esta playa bañistas provenientes de fuera de la localidad y es utilizada igualmente como lugar de descanso por el amplio abanico de servicios que ofrece, entre ellos área adaptada y zona de recreo infantil. Esta playa, que presume de sus 1.300 metros de longitud por 90 de anchura media, también es atravesada al norte por la Ruta del Camaleón y cuenta con una zona de bañon con oleaje moderado y una arena fina y blanca.

La Playa Icona-Pesmar, muy similar a las anteriores por ser una continuación hacia el este, cuenta con 550 metros de longitud y unos 90 metros de anchura media. También se distingue igualmente por su total ausencia de construcciones y por su oleaje moderado y blanca y fina arena.

Todas estas playas están equipadas con pasarelas de acceso, aparcamientos, duchas, lavapiés, servicios, puntos de vigilancia con torretas, puntos de información sobre el estado del mar, megafonía y servicio de salvamento y socorrismo. También poseen una oferta de ocio con espacios para actividades acuáticas y náuticas, chiringuitos, varios campings y zonas de alquiler de hamacas y sombrillas.

Veraneantes toman el sol y disfrutan de una jornada playera.

Usuarios por la pasarela de madera en el acceso de la playa.

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