Aniversario en el Nazareno
pórtico de semana santa
Hoy se cumplen 75 años de la bendición de la imagen del Nazareno que sustituyó a la primitiva, incendiada en 1936 Reafirma la presencia permanente del Señor en Huelva
Un día como hoy de hace 75 años se abría una nueva primavera para las hermandades. La presencia recuperada entre los onubenses de la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno desataba una nueva esperanza. Era domingo de Cuaresma. La alegría iba más allá de la propia Hermandad de la Madrugá, la compartía toda Huelva, porque toda la ciudad es nazarena.
Vimos ya hace algunos, muchos años, el documento en el que el párroco José Manuel Romero solicita la bendición de la imagen del Señor. Emocionaba darle la vuelta al documento y ver la firma del cardenal autorizándolo el día 18 de marzo de 1938, dos días después. La prensa, en la 'Información religiosa' inserta una nota dando los detalles de la bendición. Sería el día 20, a las 18:30, en el atrio de la parroquia de la Concepción, un templo que aún presentaba la huella de la barbarie sufrida. La imagen, regalo de Antonio Herrero de los Reyes, que vivía en Jerez de la Frontera y ya había donado la imagen de la Virgen de la Amargura, obras de Ramón Chaveli y policromadas por Padilla. Don Antonio recibió allí mismo el título de hermano mayor honorario. Se dijo entonces que era una imagen fiel expresión de religiosidad y de arte. Bendecida mirando al cielo de Huelva, casi en la misma calle, por José Manuel Romero Bernal, asistido por Antonio Pérez Reina y Marcos Vela. Acudieron todas las autoridades, hubo banda de cornetas y desfile delante de la imagen. Luego toda la ciudad caminó detrás del Señor y le aplaudió cuando inició la marcha hacia la iglesia de la Milagrosa donde quedó al culto, allí le recibió una capilla musical y las sentidas palabras del párroco. Se esperó al Domingo de Ramos para su besapiés.
Todavía quedaba vivir otro acontecimiento más, sentir de nuevo su presencia en la Madrugada. Volvió a salir de la iglesia en ruinas, una procesión sencilla en cuanto a pasos, había que llevar las velas de casa y las mujeres tenían sitio tras el Nazareno. Huelva había recuperado al Señor. De nuevo la Milagrosa y a partir de ahí la historia la ha escrito otra vez Huelva hasta nuestros días.
Hoy no está aquella imagen entre nosotros, dicen que un incendio fortuito acabó con ella, el 19 de abril de 1950. Su recuerdo está en unas antiguas fotos y su rostro enmarcado en un cuadro en la casa de hermandad. De nuevo volvió, en las manos de Sebastián Santos, a resurgir otra escultura de la madera para que tuviéramos presente su rostro, para no faltarnos su presencia.
Aquella primera talla que llegó a la parroquia de la Purísima Concepción desde el convento de la Victoria, de la calle Puerto, la perdió Huelva en uno de sus días más tristes, en el que la sinrazón incendió el templo en 1936, las puertas mismas de la Guerra Civil. Aquel Nazareno que quisieron desvanecer entre las cenizas volvió a resurgir en 1939 y hoy el recuerdo va más allá de una talla de la que se cuentan los años. Celebramos 75 años de reafirmar la devoción al Nazareno. No se sacarán ni imágenes ni habrá cultos especiales, aunque es el día más importante de su historia unido al de su fundación tantas veces recordada, porque nadie pudo acabar con el Señor, con su devoción. Está ahí, en su capilla, para esperar a Huelva como lo hace cada día del año.
También te puede interesar
Lo último