La importancia de conocer una segunda lengua se hace cada vez más evidente en nuestras sociedades. Por esto, el sistema educativo se ha hecho eco de esta necesidad y se ha puesto manos a la obra. El instituto Alto Conquero de la capital onubense es un claro de ejemplo de ello ya que es uno de los dos centros educativos de Andalucía plurilingüe. Hace ya ocho años, este instituto fue uno de los 27 centros andaluces que se embarcó en la experiencia piloto del bilingüismo incluyendo el francés en algunas de las materias del programa de estudio de sus alumnos. Tal y como explica el director del centro, Manolo Martínez, "la experiencia fue exitosa y muy enriquecedora", por lo que decidieron seguir dando ejemplo al integrarse, hace ya tres años, en un pionero programa de la Junta de Andalucía, aún experimental, por el que se pretende empezar a implantar en los centros públicos de la Comunidad el plurilingüismo. Así fue como el Alto Conquero ha incorporado también a sus clases la docencia en inglés, además de en francés, por lo que se ha convertido en un referente a nivel provincial y autonómico en la integración de lenguas extranjeras en la cotidianidad de sus aulas.

La metodología está muy trabajada. Según explica el director, el nivel de las clases de inglés y francés en el instituto es muy elevado y cada docente especialista en estos idiomas cuentan con al apoyo de asistentes nativos en el aula, tanto para asesorar a los propios profesores como a los alumnos. En total, el centro cuenta con tres asistentes de francés y dos de inglés. Lo novedoso se observa en el resto de las materias. Desde primero de ESO, los estudiantes reciben dos de las materias a cursar en francés o en inglés, dependiendo de la modalidad lingüística en la que se inserten. Por ejemplo, en el primer curso de Secundaria, los alumnos del Alto Conquero estudian Matemáticas y Ciencias Sociales en francés o inglés a tenor de su modalidad lingüística. A continuación, en segundo de ESO, las materias son Matemáticas y Educación Física, y así en todos los cursos hasta bachillerato. Pero las expectativas del instituto van más allá, ya que en el cuarto curso de Secundaria los alumnos que se insertan en la modalidad de francés estudian alguna asignatura en inglés y viceversa, con el fin de que el plurilingüismo de los alumnos sea real. Al igual que en las clases de inglés y francés, los profesores y los alumnos cuentan con el apoyo de un asistente en las clases del resto de las materias que se imparten en alguno de estos dos idiomas. De manera frecuente, estos asistentes nativos se encargan de la clase con el objetivo de aumentar el aprendizaje de los estudiantes.

Para llevar a cabo este ambicioso proyecto, la formación de los docentes del centro ha sido y sigue siendo muy intensa. Pero además de lo complicado del proceso, el inicio de los alumnos en el instituto se organiza de manera especial. Los profesores del IES se reúnen con los del colegio de procedencia de los alumnos, mayoritariamente del García Lorca, para evaluar el nivel en idiomas de estos alumnos de nuevo ingreso. Atendiendo a este veredicto, y con el consentimiento de los padres, los nuevos alumnos son agrupados en una modalidad lingüística u otra según el idioma en el que presenten más conocimiento, aunque los adolescentes con un nivel bajo no entrarán en ninguna modalidad pero durante su estancia en el instituto podrán acogerse a alguna de ellas según su evolución en el conocimiento de los idiomas.